viernes, 23 de septiembre de 2011

Capitulo 15. El ladrón




Tal y como se lo había indicado Dumbledore, Lily fue por algo de comer después de pedirle al profesor que esperar su regreso para contar lo que había descubierto y saber que misiones tendría cada uno, también  preparo algo para Harry por si acaso despertaba, regresó con una bandeja llena de diferentes platos, la mayoría preparados por ella, otros cortesía de los elfos del colegio, además de una jarra a rebosar de jugo de calabaza e incluso una botella de hidromiel que no habían terminado días antes de encontrar el libro

-Que bueno que ya volviste pelirroja-dijo sirius-ya estaba pensando en hacer yo mismo una visita a las cocinas
-Ignoralo cielo-contestó james tomando un sándwich de la bandeja, al tiempo que Remus tomaba un emparedado y Dumbledore se servía un poco de hidromiel- ya sabes que canuto solo piensa en comer

En ese momento una luz plateada se materializo en medio de ellos sorprendiéndolos, hablando con la voz de Pettegrew

-Estaré allí sobre las siete- y luego se desvaneció, los chicos supusieron que el patronus no tenia forma debido a que no había suficiente luz en el corazón de Peter como para hacerlo tomar forma

-Bueno eso nos concede tiempo para que les cuente todo sobre mis averiguaciones y además para que lean el siguiente capítulo-anunció Dumbledore

-¿Encontró la cueva?-fue la primera pregunta de Sirius

-Déjame decirte que creo que ya se donde se encuentra-explicaba el director- en el orfanato donde se crio Voldemort-explicó Dumbledore con calma -los llevaban a una playa, y una vez Tom cometió una de sus fechorías allí, por lo que creo que puede ser allí donde escondió el horrocrux y donde Regulus lo rescató

-¿Y cuando vamos?-dijo el merodeador lleno de decisión-podemos partir ahora mismo si así lo desea

-Acuerdate que tenemos que esperar la cena con Peter y todo lo demás-respondió James- además creo que deberías pensarlo un poco

-No tengo nada que pensar James-dijo sirius y el hecho que usara su nombre en lugar de su apodo le demostraba la seriedad de sus palabras- también iría a esa cueva, si fueras tu el que murió allí, además míralo como una misión de la orden, hace mucho que no tenía algo de acción

Lily se alegró de que el buen animo estuviera volviendo a Sirius

-Bueno señora Potter-dijo sirius con burla- ¿se encargará de cuidar de cornamenta en mi ausencia?

-Con mucho gusto señor Black-contestó Lily siguiéndole el juego-solo si promete volver pronto-anunció un poco mas seria y preocupada por el hombre al que desde hace tiempo consideraba su amigo

-No te preocupes, no te desharás de mi tan fácilmente pelirroja-dijo el restandole importancia al asunto-todavía tengo 14 años antes de que tenga que morir-terminó con una sonrisa

Dumbledore observaba en silencio, en verdad admiraba la valentía y el coraje de esos 4, y hasta hace un tiempo la lealtad de Peter

-También he estado investigando cuales pueden ser los otros posibles Horrocruxes-continuo el anciano-pero un paso a la vez, por ahora ¿Qué te parece Remus si lees el siguiente capitulo? De esa forma terminaremos antes y tendremos tiempo de prepararnos para el encuentro con Peter

Todos se tensaron ante esto ultimo pero sabían que era algo que tenia que pasar, sirius rompió la tensión

-Bueno no se de que nos preocupamos, después de todo es solo una rata, un simple pesticida en las paredes y el piso bastaran

James sonrió solo a medias, al igual que Remus, a pesar de todo sirius logró lo que deseaba y el ambiente se aligeró un poco antes de que el licántropo empezara a leer

Capítulo 14
EL LADRÓN

-Ahora hay ladrones!-dijo sirius riendo- vaya que estan bien las cosas allí, se enfrentan a voldemort, a los mortifagos, al ministerio y ahora también a los ladrones

Harry abrió los ojos y quedó deslumbrado por el verde y dorado; no tenía ni idea de lo que había sucedido, solo sabía que yacía en lo que parecían hojas y ramitas. Luchando por llevar aire a unos pulmones que parecían aplastados, parpadeó y se dio cuenta de que la luz deslumbrante de colores chillones era la claridad del sol, que se colaba a través de un dosel de hojas a mucha altura sobre él.

-¿Por qué no volvieron a Grinmauld Place?-inquirió Lily y los demás se encogieron de hombros

-A lo mejor se aburrieron del retrato de mi madre-dijo sirius con soltura- apuesto que hasta Kreacher ya quiere quemarla.

Se apoyó en las manos y se puso de rodillas, preparado para enfrentarse a una criatura pequeña y feroz, pero vio que el objeto era el pie de Ron. Mirando alrededor Harry observó que él y Hermione yacían sobre el suelo de un bosque, aparentemente solos.
El primer pensamiento de Harry fue que era el Bosque Prohibido,

-¿Es que ninguno ha leído historia de Hogwarts?—dijo con impaciencia Lily

-No, pelirroja, para eso estan lunático y tu entre nosotros, y para eso esta hermione con ellos-dijo sirius con una sonrisa.

-De cualquier forma a estas alturas ya deberían saber que no es posible aparecerse dentro del castillo de Hogwarts ni ninguno de sus terrenos-dijo cortante Remus-por lo que ese pensamiento es totalmente ilógico-dijo antes de empezar a leer de nuevo

 y por un momento, incluso sabiendo lo tonto y peligroso que sería que Aparecerse en los terrenos de Hogwarts, su corazón dio un salto al pensar en escabullirse entre los árboles hacia la cabaña de Hagrid. Sin embargo, en los pocos momentos que le llevó a Ron emitir un gruñido bajo y a Harry empezar a gatear hacia él, se dio cuenta de que éste no era el Bosque Prohibido. Los árboles parecían mas jóvenes, había espacios mas amplios y el terreno era mas claro.

-Ahora va a resultar que Harry es un experto en el bosque prohibido-dijo james con una mezcla de preocupación y orgullo por su hijo, al recordar todas las aventuras vividas con sus amigos allí

Se encontró con Hermione, también apoyada sobre las manos y rodillas, junto a la cabeza de Ron. En el momento que sus ojos se posaron sobre Ron, todas las otras preocupaciones volaron de la mente de Harry, ya que la sangre empapaba por completo el lateral izquierdo de Ron y su cara de color blanco grisáceo, destacaba sobre el suelo lleno de hojas.

Lily ahogo un grito, el mejor amigo de su hijo estaba herido, James de inmediato miró a sirius y Remus, pensando que mataría al desgraciado que se atreviera a tocarlos.

La poción multijugos ahora estaba desapareciendo. Ron estaba a medio camino entre su apariencia normal y la de Cattermole, su pelo se volvía mas y mas pelirrojo mientras su cara perdía el poco color que le quedaba.
—¿Qué le ha pasado?
—Ha sufrido una despartición—dijo Hermione, con los dedos ya ocupados en la manga de Ron, donde la sangre era mas abundante y oscura.

Sirius se preocupó, siempre había pensando algo cómico el hecho de tener una parte del cuerpo en un lado y otra en otro, pero con la imagen que describía el libro, tuvo que admitir que no era nada divertido.

Harry miró, horrorizado, como abrí con violencia la camisa de Ron. Siempre había pensado que escindirse era algo cómico, pero esto… Sus tripas se revolvieron con desagrado cuando Hermione descubrió el antebrazo de Ron, donde faltaba un gran pedazo de carne, sacado limpiamente como si se hubiera usado un cuchillo.
—Harry, rápido, en mi bolso hay una pequeña botella con la etiqueta ‘Esencia de Díctamo…
—El bolso… sí…

Accio” pensó Remus con sencillez, pero siguió leyendo

Harry se apuró hacia el lugar donde había aterrizado Hermione, agarró el pequeño bolso adornado con cuentas y metió la mano en el interior. Al momento, empezó a tocar objeto tras objeto: sintió lomos de cuero de libros, mangas de lana de jerséis, tacones de zapatos…
—Rápido.
Agarró su varita del suelo y la apuntó a las profundidades del bolso mágico.
—¡Accio Díctamo!

Remus no puedo contenerse en este ocasión

-Hasta que se le ocurrió-murmuró por fin, ganándose una mirada de reproche por parte de Lily

-Tan solo tiene 17 años, debería estar terminando el colegio, no siendo el líder de una guerra contra el mago tenebroso mas peligroso de los últimos tiempos-dijo colerica

-Aún así, era una decisión sencilla—contestó Remus sin inmutarse

-Ya pelirroja.-dijo sirius intentando controlar el animo-ya sabes que es un lobo de biblioteca.

Esto logró que todos rieran, Dumbledore permanecía tan callado que los todos olvidaban por momentos que se encontraba allí

Una pequeña botella marrón salió zumbando del bolso; la cogió y volvió con rapidez junto a Hermione y Ron, cuyos ojos ahora estaban medio cerrados. Todo lo que se veía entre sus pestañas eran franjas del blanco globo ocular.
—Se ha desmayado —dijo Hermione, que también estaba bastante pálida; ya no parecía Mafalda, aunque su pelo todavía estaba gris en algunas partes…
—Destapala en mi lugar, Harry, me tiemblan las manos.
Harry arrancó el tapón de la pequeña botella, Hermione la cogió y vertió tres gotas de la poción en la herida que sangraba. Un humo verdoso se elevó hacia arriba y cuando se aclaró, Harry vio que la sangre había dejado de manar. Ahora la herida parecía que tuviera varios días; una piel nueva se estiraba sobre lo que un momento antes había estado en carne viva.

Lily se tranquilizó, sabia que el hecho de que Ron muriera habría sido un golpe muy duro para su hijo, quien ya había pasado por suficientes cosas, además tampoco era justo que el pelirrojo y la chica pasaran por todo eso, solo por ser los amigos de Harry

—Guau —dijo Harry.
—Es todo lo que me siento segura de hacer —dijo Hermione temblorosa—. Hay hechizos que lo curarían completamente, pero no me atrevo a intentarlos por si acaso me salgan mal y cause mas daño… Ya ha perdido tanta sangre…
—¿Cómo se hirió? Quiero decir... —Harry sacudió la cabeza intentando aclararla, para darle sentido a lo que fuese que hubiera sucedido— ... ¿por qué estamos aquí? Creía que íbamos a volver a Grimmauld Place.
Hermione inspiró profundamente. Parecía estar al borde de las lágrimas.

-Vaya!-comentó sirius-parece estar triste ante el hecho de no poder volver a ese encierro

-Míralo desde este punto, canuto-opinó James-era eso, o vivir a la interperie

-Supongo que tienes razón, cuando no tienes opciones hasta ese lugar es un buen sitio para resguardarse-aceptó sirius de mala gana

—Harry, no creo que vayamos a poder volver allí.
—¿Qué estas…?
—Cuando desaparecimos, Yaxley me agarró y no pude deshacerme de él, era demasiado fuerte, y todavía estaba sujeto cuando llegamos a Grimmauld Place. Y entonces… bueno, creo que debió haber visto la puerta y pensar que parábamos ahí, así que aflojó su agarre, conseguí apartarlo y nos traje aquí.
—Pero entonces, ¿dónde esta? Espera un momento… No querrás decir que esta en Grimmauld Place, ¿no? No puede entrar allí, ¿verdad?
Los ojos de ella brillaron con lágrimas no derramadas mientras asentía.

-Creo que es importante porque ese sitio te recuerda a ti!-opino Lily mirando a sirius-ya nos hemos dado cuenta de lo importante que fuiste para el, mientras estuviste a su lado

-Creo que Lily tiene razón-comentó Dumbledore-a Harry le ha dolido muchísimo tener que separarse de ti.

-Bueno no hay de que preocuparse-contestó el aludido con soltura- mi ahijado me tendrá a su lado hasta que se harte, o hasta que Lily me haga alejarme por considerarme mala influencia—terminó mirando a la esposa de su mejor amigo

-Creo que tendría que alejarlo también de su padre para eso—contestó riendo.

—Harry, creo que puede, yo... lo obligué a soltarme con una Maldición de Repulsión, pero ya le había metido dentro de la protección del encantamiento Fidelio. Desde que Dumbledore murió, hemos sido Guardianes Secretos, así que le desvelé el secreto, ¿verdad?
No había fingimiento posible. Harry estaba seguro de que tenía razón. Fue un serio golpe. Si ahora Yaxley podía entrar en la casa, de ningún modo podían regresar. Incluso ahora podría estar llevando a otros mortífagos allí mediante la Aparición. A pesar de lo sombría y agobiante que era la casa, había sido su único refugio seguro; precisamente ahora, que Kreacher era mucho mas feliz y amistoso, una especie de hogar. Con una punzada de pesar que no tenía nada que ver con la comida, Harry se imaginó al elfo doméstico preparando el pastel de bistec y riñón que Harry, Ron y Hermione nunca comerían.

-¿Profesor?-Preguntó Sirius-¿cree que sea buena idea que llamé a Kreacher?

-Creo que deberíamos esperar a tener el falso horrocrux, para pedirle el verdadero, pero si puedes llamarlo ahora y tratarlo de mejor manera

Sirius asintió al tiempo que contestaba

-Lo haré en cuanto salgamos de la cena con Peter

—¡Harry, lo siento, lo siento tanto!
—¡No seas tonta, no fue culpa tuya! Si acaso, fue mía...
Harry metió la mano en su bolsillo y sacó el ojo de Ojoloco. Hermione retrocedió, con expresión horrorizada.

Lily bufó ofendida cuando recordó lo ocurrido con el ojo de Alastor Moody

-Tranquilízate, amor- le dijo James con una sonrisa que ella conocía muy bien-recuerda que ya le tenemos un pequeño regalo a esa mujer!

-Pero aún no hemos decidido cuando!-protestó como niña pequeña

-¿Que te parece cuando pase toda esta locura?-inquirió Dumbledore-cuando hayamos destruido los Horrocruxes

-Me parece perfecto-dijo ya mas calmada Lily y algo avergonzada por la intervención de Dumbledore  y Remus con una sonrisa continuo leyendo

-Ese es mi director!-gritó Sirius antes de que Remus hubiese podido decir mas de una silaba

El director agradeció las palabras con una sonrisa y ahora si Remus pudo leer

—Umbridge lo colocó en la puerta de su oficina, para espiar a la gente. No podía dejarlo allí… pero así fue como supieron que había intrusos.
Antes de que Hermione pudiera responder, Ron gimió y abrió los ojos. Todavía estaba gris y su cara brillaba por el sudor.

-Pobre chico-apuntó Dumbledore- es mas poderoso de lo que piensa, pero su inseguridad no le deja sacar eso a flote

James pensó dolorosamente en Peter, en su inseguridad y en como siempre a pesar de todo el, Remus y sirius siempre lo apoyaron

-Al menos es leal—dijo sirius y james notó que sus pensamientos iban en la misma dirección-eso es mas importante que cualquier habilidad mágica

Remus asintió casi imperceptiblemente y Lily tomo la mano de su esposo y le murmuro muy quedamente

-Aún los tienes a ellos, Remus y sirius nunca te van a fallar, al igual que yo

James asintió y Remus empezó a leer de nuevo

—¿Cómo te sientes? —susurró Hermione.
—Fatal —dijo Ron con voz ronca, haciendo una mueca de dolor al sentir el brazo dolorido—. ¿Dónde estamos?
—En el bosque donde celebraron la Copa Mundial de Quidditch —dijo Hermione—. Quería algún sitio apartado, oculto, y este fue…
—… el primer lugar en el que pensaste —terminó Harry por ella, echando un vistazo alrededor al claro aparentemente desierto. No pudo evitar recordar lo que había sucedido la última vez que habían Aparecido en la primera localización. Hermione había estado pensando en cómo los mortífagos los habían encontrado a los pocos minutos. ¿Había sido Legelemancia? ¿Sabían Voldemort o sus secuaces, incluso ahora, a dónde los había llevado Hermione?


-Sigo preguntándome como los habrán encontrado-dijo Remus

-Yo también Remus-dijo Dumbledore para asombro de todos

-¿Quiere decir señor que usted no lo sabe?-preguntó Lily

-Me temo que no lo sé, pero estoy seguro de que lo averiguaremos.

—¿Crees que deberíamos movernos? —preguntó Ron a Harry, y Harry pudo ver por la expresión de Ron que éste estaba pensando lo mismo.

-Lo ven-indicó Lily- no es tan malo como ustedes piensan

-Creo que tienes razón-estuvo de acuerdo Remus-a pesar de que les falta educación mágica, les sobran instintos

-No se puede ser hijo de un merodeador sin tener instinto para que no te encuentren-opinó sirius- por algo no nos descubrían en todas las travesuras que hacíamos
-Estoy seguro de que sus hazañas llegaran hasta varias generaciones-estuvo de acuerdo Dumbledore

Sirius se puso en pie levantó un brazo y anuncio con una falsa seriedad

-Juro solemnemente que nuestras historias quedaran consignadas para pasar de  generación en generación, Lunático eres el mejor redactando tendrás que hacer los honores.

Todos soltaron una carcajada, Dumbledore incluido

-Mi hijo es el primogénito de la generación de merodeadores, por lo tanto tendrá el derecho de conservar nuestros tesoros mas preciados: la capa invisible y el mapa del merodeador, pero también tendrá la obligación de compartirlos con los futuros hijos merodeadores y liderar una nueva generación de revoltosos en Hogwarts

-De acuerdo- dijeron los otros dos, para que luego sirius continuara- no podemos dejar al futuro hijo de lunático y Tonks sin un guía para divertirse en el colegio

Todos rieron, pero Remus se defendió

-Cuando mi hijo vaya al colegio Harry ya no estará allí-dijo sonrojado pero decidido

-Tienes razón—dijo sirius que no borraba la sonrisa de su cara-pero crecerá escuchando nuestras historias y las propias de Harry, así que no tendrá escapatoria, es un merodeador y punto

Lily negó con la cabeza y Remus decidió inteligentemente quedarse callado antes de que sirius lo dejara peor parado

—No sé.
Ron todavía estaba pálido y sudoroso. No había hecho ningún intento de levantarse, y daba la impresión de estar todavía demásiado débil para hacerlo.
La posibilidad de moverlo era desalentadora.
—Quedémonos aquí de momento —dijo Harry.

-Es lo que yo habría hecho, espero que coloquen sortilegios protectores-era Remus quien expresaba su opinión

Con expresión aliviada, Hermione se puso en pie.
—¿A dónde vas? —preguntó Ron.
—Si nos quedamos, deberíamos poner algunos encantamientos protectores alrededor —respondió, y elevando su varita, empezó a caminar en un amplio círculo alrededor de Harry y Ron, murmurando encantamientos mientras avanzaba. Harry vio pequeñas perturbaciones en el aire que los rodeaba, era como si Hermione hubiese conjurado un viento cálido en el claro.

-Insisto te llevaras extremadamente bien con ella-dijo sirius-aunque casi mejor que aun no se conozcan, ya tenemos suficiente de estudio contigo y Lily por aquí

Lily se puso roja de furia, y un chorro de agua aterrizo en la cara de un sorprendido sirius

-Eres rápida!.-dijo riendo divertido mientras se secaba con su varita-eso tengo que reconocerlo

-Mas vale que no lo olvides Black—dijo molesta la chica moviendo amenazante su varita- Remus continúa

—Salvio Hexia… Protego Totalum… Repello Muggletum… Muffliato… Podías sacar la tienda, Harry…
—¿Tienda?
—¡En el bolso!
—En el… por supuesto —dijo Harry.
Esta vez no se molestó en rebuscar en el interior, sino que usó otro Encantamiento Convocador.

-Aprende de sus errores-dijo con aprobación Remus-eso es una cualidad decididamente de Lily

La pelirroja asintió de acuerdo, y james beso a su esposa en la mejilla, Lily entendió que estaba orgulloso de ella.

La tienda salió en un montón de bultos, con lonas, cuerda y palos. Harry la reconoció, en parte por el olor a gato, como la misma tienda en la que habían dormido la noche del Mundial de Quidditch.

-MI HIJO FUE A UN MUNDIAL DE QUIDDITCH-Gritó james emocionado y feliz, luego esa alegría se convirtió en tristeza y dijo mas apagado- y no estuve allí para ver su rostro

-Cornamenta todos nos sentimos igual-dijo sirius-pero por algo este libro llegó a nuestro tiempo, tal vez alguien quiere que cambiemos esto, y nos da la información necesaria para hacerlo.

-Además también nos muestra claves para vencer a Voldemort!-dijo Remus

-Y nos advirtió que pasaría si usamos a Peter como guardian-dijo Lily-tenemos en nuestras manos evitar todo esto

-Lily tiene razón, James-dijo Dumbledore-además estoy seguro de que este libro no llego aquí por error, esta aquí por alguna razón

James asintió al tiempo que hablaba

-Lo siento cielo-dijo mirando a su esposa-no tendría que haberme puesto así. Tú no deberías consolarme a mí, sino al revés

Lily mostró su anillo al tiempo que decía: En las buenas y las malas, para finalmente besar a su esposo, sin importarle que estuviera el mismo Albus Dumbledore allí

Una vez se separaron, tiempo que Remus aprovechó para tomar un trago de hidromiel y sirius para tomar otro emparedado, el licántropo empezó a leer de nuevo

—Creí que pertenecía a ese Perkins del Ministerio, ¿no? —preguntó, empezando a desenredar las varillas de la tienda.
—Aparentemente no la quiso de vuelta, tiene mucho lumbago —dijo Hermione, ahora realizando una complicada figura de ocho movimientos con su varita—, así que el padre de Ron dijo que me la podía llevar prestada. ¡Erecto! —añadió, apuntando con su varita a las deformadas lonas, que en un movimiento fluido se elevaron en el aire y se asentaron, completamente  colocadas, en el suelo delante de Harry, de cuyas sorprendidas manos saltó una varilla, para aterrizar con un golpe sordo final en el extremo de un viento.
Cave Inumicum —terminó Hermione con una floritura hacia el cielo—. Esto es todo cuanto puedo hacer. Por lo menos, lo sabremos si se acercan. No puedo garantizar que mantenga fuera a Vol…
—¡No pronuncies el nombre! —la cortó Ron, con voz áspera.

-El miedo a un nombre solo agranda el temor al hombre-dijo Dumbledore con soltura-es increíble que después de tanto tiempo la genta siga temiendo mencionar su nombre

-Claro que muy poca gente conoce su nombre real-apuntó Remus

-En ese tienes razón-dijo james-le tienen tanto miedo que nadie se atreve a investigar sobre el, y mucho menos luchar en su contra

-Alguno somos lo suficientemente locos como para hacerlo—dijo sirius
-Me alegra de que así sea—dijo Dumbledore finalmente

Harry y Hermione se miraron el uno al otro.
—Lo siento —dijo Ron, gimiendo un poco al elevarse para mirarlos—, pero se siente como una… una maldición o algo así. ¿No le podemos llamar Quien-tú-sabes, por favor?
—Dumbledore decía que el miedo a un nombre… —empezó Harry.

-Parece que algunos si les llego el mensaje—dijo sirius

-Espero que este chico convenza a su amigo de que lo haga-dijo james-es una tontería todo esto de quien-tu-sabes y el-que-no-debe-ser-nombrado

—Por si no lo has notado, colega, llamar a Quien-tú-sabes por el nombre no le sirvió de mucho a Dumbledore al final. —Le espetó Ron como contestación—. Sólo... sólo muéstrale a Quien-tú-sabes algo de respeto, ¿vale?

-Respeto-corearon varias voces con evidente indignación, pero Remus siguió leyendo

—¿Respeto? —repitió Harry, pero Hermione le lanzó una mirada de advertencia; aparentemente no podía discutir con Ron mientras éste estuviera en una condición tan debilitada.
Harry y Hermione medio llevaron, medio arrastraron a Ron hasta la entrada de la tienda. El interior era exactamente como Harry recordaba, un pequeño apartamento, completo con cuarto de baño y una pequeña cocina. Apartó a un lado un viejo sillón y bajó a Ron con cuidado a la cama de abajo de una litera. Incluso este pequeño recorrido había dejado a Ron mas pálido, y una vez que lo tuvieron colocado en el colchón cerró los ojos y no habló durante un rato.
—Haré algo de té —dijo Hermione sin aliento, sacando un hervidor y tazas de las profundidades de su bolso, y dirigiéndose hacia la cocina.

-El chico ha perdido mucha sangre, acaban de escapar del ministerio y ¿la chica quiere hacer te?—preguntó divertido Sirius

-Porque sin duda tu sabes exactamente que hacer en esa situación!—le recriminó Lily

Sirius consideró mas prudente para su salud quedarse callado, Lily era la única que tenía ese efecto en el.

Harry encontró la bebida caliente tan bienvenida como lo había sido el whisky de fuego la noche en que había muerto Ojoloco; pareció consumir un poco del miedo que palpitaba en su pecho. Después de un minuto o dos, Ron rompió el silencio.
—¿Qué crees que le pasó a los Cattermole?
—Con algo de suerte, se habrán marchado —dijo Hermione, aferrando su taza caliente para reconfortarse—. Si el señor Cattermole fue capaz de pensar con claridad, habrá sacado a la señora Cattermole mediante Aparición Conjunta y ahora mismo estarán huyendo del país con sus hijos. Eso es lo que Harry le dijo que hiciese.
—Vaya, espero que escapen —dijo Ron, recostándose contra las almohadas. El té parecía estar haciéndole bien; le había vuelto un poco el color—. Aunque no me pareció que Reg Cattermole fuese tan ingenioso, por la forma en que todo el mundo me hablaba cuando era él. Dios, espero que lo consiguiesen… Si ambos acabasen en Azkaban por nuestra culpa…

-Yo también espero que lo hayan logrado!-dijo Lily-sería terrible que terminaran en Azkaban

-De cualquier forma el ministerio ya quería encerrar a la mujer-dijo james con rabia-por lo que si logran escapar será gracias al alboroto que armó Harry en el ministerio


Harry miró a Hermione y la pregunta que había estado a punto de formular —que la falta de varita de la señora Cattermole le impediría Aparecerse Conjuntamente con su marido— murió en su garganta. Hermione estaba observando a Ron preocuparse por el destino de los Cattermole, y había tanta ternura en su expresión, que Harry casi se sintió como si la hubiera pillado besándolo.
—Así que, ¿lo cogiste? —le preguntó Harry, en parte para recordarle que estaba allí.

-Vaya tacto!-dijo Lily

-Es hijo de cornamenta-replicó con simpleza sirius-extráñate donde tenga tacto

-Tienes razón—dijo la pelirroja

-Lily!!!—exclamó indignado James

-¿Qué?-dijo Lily-tiene razón y lo sabes

James sonrió, no habría podido discutir con Lily ni aunque quisiera

—Si cogí… ¿cogí qué? —dijo ella mirándolo fijamente.
—¿Por que hemos pasado todo eso? ¡El guardapelo! ¿Dónde esta?
—¿Lo tienen? —gritó Ron, elevándose un poco mas sobre las almohadas—. ¡Nadie me dice nada! ¡Caray, podían haberlo mencionado!

Lily reía divertida por el giro que había tomado la situación, en un momento los amigos de su hijo se veían con ojos de enamorados, y ahora discutían por una trivialidad

—Eh!, que nos perseguían los dementores—dijo Hermione—. Aquí esta.
Y sacó el guardapelo del bolsillo de sus ropas y se lo pasó a Ron.
Era tan grande como un huevo de gallina. Una ornamentada letra S con muchas piedrecillas verdes incrustadas, destelló con un brillo apagado en la luz difusa que brillaba a través del techo de lona de la tienda.
—¿No hay ninguna posibilidad de que alguien lo destruyera desde que estuvo en posesión de Kreacher? —preguntó Ron con esperanza—. Quiero decir, ¿estamos seguros de que todavía es un Horrocrux?
—Eso creo —dijo Hermione, cogiéndolo de nuevo y examinándolo mas cerca—. Habría alguna señal de daño si hubiese sido mágicamente destruido.

-¿Como se destruye un horrocrux?-inquirió Lily-leímos claramente que un colmillo de basilisco lo destruye, y usted nos dijo que la espada de Gryffindor—le dijo a Dumbledore—pero ¿hay algo más que pueda destruirlo.?

-Hay muchas maneras-dijo Dumbledore-pero como nadie conoce los Horrocruxes, tampoco saben como se pueden destruir

-¿Nos lo dirá?-inquirió James

-Por supuesto—contestó el anciano-pero no ahora, debemos acabar el capitulo y ultimar detalles

Todos asintieron al tiempo que Remus leía de nuevo

Se lo pasó a Harry, que le dio vueltas entre los dedos. El guardapelo estaba en perfecto estado. Recordó los restos destrozados del diario, y cómo la piedra en el Horrocrux del anillo se había rajado cuando Dumbledore lo había
destruido.
—Creo que Kreacher tiene razón —dijo Harry—. Vamos a tener que descubrir cómo abrir esta cosa antes de poder destruirla.

-Después de todo parece que Kreacher es un elfo bastante inteligente

-Hablando de Kreacher-dijo sirius-hemos olvidado que en su historia contaba que mi hermano le prohibió contarle eso a nadie de la familia, así que ¿como haremos para que nos de el medallón original?

-Sencillo—contestó Lily-después de que te hayas ganado su confianza le ordenaras amablemente que le cuente la historia a cualquiera de nosotros, y que nos diga dónde esta el medallón original, y asunto arreglado

-Lo ves!—exclamó canuto sorprendiendo a todos-te imaginas a hermione aquí!, entre Remus, tu y ella nos volverían locos

Lily consideró echarle un maleficio, pero al final la risa de su esposo y la sonrisa de Dumbledore la hicieron curvar los labios también, hasta formar una amable y alegre expresión en su rostro

-No puedo creer lo que voy a decir-dijo seria-pero espero que nunca cambies sirius

Esa confesión confundió a todos, pues Lily se pasaba el tiempo diciéndole a sirius que madurara y que creciera, para que ahora le dijera que no quería que cambiara nunca

-¿Quien te entiende?-dijo sirius confundido y divertido-aunque me alegro que te dieras por vencida, el espíritu merodeador nunca muere—finalizó con una enorme sonrisa que Lily correspondió

Una repentina conciencia de lo que estaba sosteniendo, de lo que vivía bajo las pequeñas puertas doradas, golpeó a Harry mientras hablaba. Incluso después de todos los esfuerzos para encontrarlo, sentía el violento impulso de arrojar lejos de él el guardapelo. Controlándose de nuevo, intentó abrirlo con los dedos. Luego probó el encantamiento que Hermione había usado para abrir la puerta de la habitación de Regulus. Ninguno funcionó. Le devolvió el guardapelo a Ron y Hermione, que hicieron todo lo posible por abrirlo, pero no tuvieron mas éxito que él.

-Me pregunto cómo se abre-murmuró quedamente Lily

—Aunque, ¿puedes sentirlo? —preguntó Ron en voz muy baja, mientras lo sostenía apretadamente en su puño cerrado.
—¿Qué quieres decir?
Ron le pasó el Horrocrux a Harry. Después de un momento, Harry pensó que sabía lo que Ron quería decir. ¿Era su propia sangre latiendo por sus venas lo que sentía, o era algo que latía dentro del guardapelo, como un pequeño corazón metálico?

-¿Es eso posible?—inquirió Remus

-Me temo que si—contestó Dumbledore-los Horrocruxes son magia muy oscura, nunca se sabe que alcances puedan tener

Esa afirmación logró preocupar a los demás, y mientras Remus leía, una parte de su mente pensaba que el asunto de los Horrocruxes debería mantenerse en secreto, no querían que otros posibles magos tenebrosos escucharan sobre ellos.

—¿Qué vamos a hacer con él? —preguntó Hermione.
—Mantenerlo a salvo hasta que descubramos cómo destruirlo —respondió Harry, y, aunque le apetecía poco, se colgó la cadena alrededor del cuello, dejando caer el guardapelo fuera de la vista bajo sus ropas, donde descansó sobre su pecho junto a la bolsita que le había dado Hagrid.

-Siento decir que no es buena idea-apuntó Dumbledore- no es aconsejable estar tan cerca de un horrocrux, aunque se tenga un espíritu tan fuerte y puro como el de Harry

-¿Qué quiere decir?-preguntó Lily preocupada- ¿esa cosa puede poseerlo o algo similar?

-No creo que pueda poseer a Harry-contestó el anciano-pero si puede poner ideas en su cabeza que no serán nada agradables

Lily asintió pensativa, cada vez le gustaba menos el asunto de los Horrocruxes, y el hecho de que voldemort hiciera mas de uno la preocupaba terriblemente

—Creo que deberíamos turnarnos para vigilar fuera de la tienda —añadió mirando a Hermione, levantándose y estirándose—. Y también tenemos que pensar en conseguir algo de comida. Tú te quedas aquí —añadió con dureza, cuando Ron intentó levantarse y se puso de un desagradable tono verde.

Sirius sonrió, recordó la vez en que después de la luna llena, James había sido herido por Remus, al día siguiente tenía su segunda cita con Lily, y el muy necio insistía en levantarse de la cama cuando sus heridas aun se estaba curando, tuvieron que aplicarle una maldición de inmovilidad total y llevar a Lily hasta la habitación para lograr que se calmara, ese día le contaron que eran animagos y la chica aunque un poco asombrada, se sintió extremadamente orgullosa de lo que los muchachos habian hecho por apoyar a Remus, cuidó y sanó las heridas de james al tiempo que abrazaba por primera vez a sirius, depositaba un beso en la mejilla de Peter y Abrazaba efusivamente a Remus, Lily ya conocía la naturaleza de su condición desde sexto año, el licántropo y la pelirroja siempre se llevaron bien, pero a lunático le aterraba contarle su secreto a Lily, una vez que lo hizo, nunca se arrepintió

Con el Chivatoscopio que Hermione le había dado a Harry por su cumpleaños colocado con cuidado sobre la mesa de la tienda, Harry y Hermione pasaron el resto del día compartiendo la tarea de vigilancia. Sin embargo, el Chivatoscopio permaneció en silencio y quieto en su posición todo el día, y ya fuese por los encantamientos protectores y hechizos repeledores que Hermione había extendido a su alrededor, o porque la gente raramente se aventuraba por esa zona, su trozo de bosque permaneció desierto, sin contar a los pájaros o ardillas ocasionales.

-Al menos tienen un respiro después de todo lo que tuvieron que pasar en el ministerio-dijo Lily

-Claro, porque es magnifico estar en medio de la nada-contestó sirius-son como vacaciones al aire libre

Lily lo miró de forma asesina, al tiempo que james contenía la risa

La tarde no trajo ningún cambio. Harry encendió su varita cuando sustituyó a Hermione a las diez, y miró hacia la escena desierta, tomando nota de los murciélagos volando muy por encima a través del único trozo de cielo visible desde su resguardado claro. Ahora se sentía hambriento, y un poco mareado. Hermione no había guardado nada de comida en su bolso mágico, ya que había asumido que esa noche regresarían a Grimmauld Place, por lo que no tenían nada que comer salvo algunos champiñones salvajes que Hermione había recogido en los árboles cercanos y cocido en un cazo.

-Con las cosas como estan no deberían dar nada por sentado-dijo Remus-deberían estar pensando siempre que no pueden regresar a un sitio donde estén cómodos, es bastante lógico que pensaran llevar comida

-Son solo jóvenes, Remus-apuntó Dumbledore-no estaban preparados para una guerra, siempre habían estado seguros en Hogwarts y ahora tienen que ser lideres de una revolución, y estan solos en eso

Las palabras de Dumbledore dispararon alarma en los ojos de Lily, james lo notó por lo que la abrazó y le indicó a su amigo que siguiera con la lectura, pero antes de que eso pudiese pasar Lily habló

-Creo que deberíamos invitar a Alice y Frank a leer con nosotros-dijo decidida-después de lo que hemos leído he entendido que Neville también es importante

-Tienes razón-dijo james-al igual que sirius y Remus ellos son de mi entera confianza, después de la cena de hoy, envíales un patronus pidiéndoles que vengan a vernos.

-¿Por qué no ahora?-inquirió la pelirroja

-Porque si se los dices ahora los mas probable es que piensen que paso algo malo, y vengan de inmediato

-Tienes razón, esperemos-concedió Lily y Remus pudo reanudar la lectura

Después de un par de cucharadas Ron había alejado su porción, con aspecto mareado. Harry sólo había perseverado para no herir los sentimientos de Hermione.

-Es como esa vez que Lily aceptó los chocolates que hizo James-dijo sirius al borde de un ataque debido a las arcadas que le causaba la risa-estaban asquerosos y ella se los comió solo por no hacerlo sentir mal

Remus reía a carcajada limpia, mientras Dumbledore solo sonreía, Lily y james bajaron la cabeza sonrojados y avergonzados

Una vez, Remus se recupero de su ataque de risa volvió a leer

El silencio que lo rodeaba fue roto por extraños crujidos y lo que sonó como ramitas rompiéndose: Harry pensó que eran sonidos causados por animales mas que por personas, pero aún así agarró la varita con fuerza y se puso alerta. Sus tripas, ya con molestias debido a la inadecuada ayuda de los champiñones correosos, hormigueaban con inquietud. Había creía que se sentiría eufórico si conseguían robar y recuperar el Horrocrux, pero de alguna manera no era así.

-¿Por que se pondría feliz por encontrar un horrocrux?-preguntó Lily inocentemente

-Cielo!—dijo james con calma-es su misión ¿tu no te ponías alegre cuando completabas tus misiones de la orden?

-Tienes razón—asintió lentamente-es solo que aun no me acostumbro a que sea un deber de Harry hacer eso, o al menos, a que el lo piense así

Todo lo que sentía mientras se sentaba mirando hacia la oscuridad, de la que su varita sólo iluminaba una pequeña parte, era temor por lo que pasaría a continuación. Era como si hubiera estado avanzando bullicioso hasta ese punto durante las últimas semanas, meses, incluso años, pero ahora que se había parado de golpe, ya no le quedasen caminos.

Todos estaban a la expectativa ¿Qué seguiría ahora?, además Lily se preguntaba si su esposo y amigos se contendrían cuando estuvieran solos con Peter, pero solo le basto una mirada a Harry para ver que así seria, por su hijo James haría cualquier cosa, al igual que ella.

Había otros Horrocruxes ahí fuera, en alguna parte, pero no tenía ni la mas mínima idea de dónde podrían estar. Ni siquiera sabía lo que eran todos. Mientras tanto, no sabía cómo destruir el único que habían encontrado, el Horrocrux que actualmente yacía contra la carne desnuda de su pecho.
Curiosamente, no había absorbido calor de su cuerpo, sino que yacía tan frío contra su piel como si acabase de salir de agua helada. De vez en cuando Harry pensaba, o tal vez imaginaba, que podía sentir el débil latido pulsando irregular al lado del suyo.
Presentimientos sin nombre lo invadieron mientras estaba sentado en la oscuridad. Intentó resistirlos, apartarlos, pero aún así lo seguían implacables.

Dumbledore asintió como si eso le aclarara algo, pero los demás inmersos en la lectura no lo notaron

Ninguno de los dos podrá vivir mientras siga el otro siga con vida. Ron y Hermione, ahora hablando en voz baja detrás, dentro de la tienda, podían alejarse si querían, él no. Y a Harry le parecía, mientras estaba sentado intentando controlar su propio miedo y cansancio, que el Horrocrux apoyado contra su pecho estaba marcando el tiempo que le quedaba…

-¿Cómo puede pensar de esa manera?-dijo Lily mirando a su ojo, con las lagrimas brillando en sus ojos esmeralda-solo tiene 17 años y piensa que va a morir

-Lily-dijo Remus con calma-piensa que voldemort lo ha perseguido desde antes incluso que naciera, es obvio que piense de esa forma, aunque ahora podemos evitarlo, y tú lo sabes

Una idea estúpida, se dijo a sí mismo, no pienses en eso… Su cicatriz estaba empezando nuevamente a doler. Tenía miedo de estar provocándolo por tener esos pensamientos, e intentó dirigirlos en otra dirección. Pensó en el pobre Kreacher, que los habría estando esperado a ellos en la casa y había recibido a Yaxley. ¿Se quedaría callado el elfo o le contaría al mortifago todo lo que sabía?

-¿Que opinan?—inquirió Lily-kreacher se quedó callado?

-Yo creo que si-dijo sirius para asombro de todos-kreacher es una criatura que una vez le es leal a alguien, le es fiel hasta el final, créanme se porque lo digo
Lily pareció mas tranquila luego de oír a sirius, y aunque James no lo expresara, el también ser relajo.

Harry quería creer que Kreacher había cambiado su actitud hacia él durante el último mes, que ahora le sería leal, ¿pero quién sabía lo que pasaría? ¿Y si los mortífagos lo torturaban? Imágenes morbosas zumbaron por la mente de Harry, y también intentó apartarlas, porque no había nada que pudiese hacer por Kreacher; Hermione y él ya habían decidido no intentar convocarlo, ¿y si también venía alguien del Ministerio? No podían contar con que la Aparición de los elfos estuviese libre del mismo fallo que había llevado a Yaxley a Grimmauld Place en el dobladillo de la manga de Hermione.

-Los elfos tienen la capacidad de dejar caer a alguien donde quieran en medio de una aparición-dijo Dumbledore-creo que ellos manejan cierto tipo de magia que esta por encima de la nuestra

-Pero también estan atados por su propia naturaleza-opinó Remus

Dumbledore asintió elegantemente, pero no agregó nada mas, por lo que después de un momento Remus siguió leyendo

Ahora la cicatriz de Harry estaba ardiendo. Pensó en que había tanto que no sabía. Lupin había tenido razón al hablar de magia que nunca habían esperado imaginado. ¿Por qué Dumbledore no le había explicado mas? ¿Había pensado que habría tiempo, que viviría durante años, tal vez durante siglos, como su amigo Nicolas Flamel?

-¿Nicolas Flamel?-preguntó asombrada Lily-el alquimista?

-Parece que consiguió sobrevivir muchos mas años-dijo Dumbledore con una amable sonrisa- y también parece que Harry escuchó de el

Si así fuese, se había equivocado… Snape se había encargado de ello… Snape, la serpiente dormida, que había atacado en lo alto de la torre… Y Dumbledore había caído… caído…

-Me sigue pareciendo injusto que el chico presenciara mi muerte-dijo apenado el director-creo que ya había pasado por mucho, como para tener que ver eso, por lo que he leído, fui una figura importante para el-dijo con orgullo

-Es fuerte—dijo Lily-podrá superarlo

—Dámela, Gregorovitch.

Todos se tensaron, recordaban que Harry estuvo soñando con el, se preguntaban si por fin sabrían el papel del hombre dentro de la historia

La voz de Harry era alta, clara y fría, y su varita estaba aferrada delante de él por una mano blanca de largos dedos. El hombre al que estaba apuntando con la varita, estaba suspendido en el aire con las piernas hacia arriba, aunque no había cuerdas que lo sujetasen; se balanceaba allí, atado de forma invisible e inquietante, con los miembros enroscados sobre su cuerpo, con la cara aterrorizada a nivel de la de Harry, rubicunda debido a la sangre que se había agolpado en su cabeza. Tenía el cabello de color blanco puro y una barba densa y tupida: un Papá Noel atado.

Ni siquiera la graciosa comparación de Harry logró relajar el ambiente en la habitación, solo fue cuando el bebe que hasta hace momentos dormía en la cuna se despertó que Lily y James salieron de aquella burbuja de preocupación para atender a su hijo. James se levantó, mientras Lily con su varita calentaba la comida que antes le había preparado, aun así Remus solo paro la lectura un momento, para reanudarla casi de inmediato

—¡No la tengo, ya no la tengo! ¡Hace muchos años que me la robaron!
—No mientas a Lord Voldemort, Gregorovitch. Él sabe… Siempre sabe.

¿Qué busca?, se preguntaban todos, para que querría voldemort a ese hombre, si no era para que le explicara la actuación de la varita de Harry, todos estaban intrigados

Las pupilas del hombre colgado estaban muy abiertas, dilatadas con miedo, y parecieron agrandarse, cada vez mas, hasta que su negrura engulló por completo a Harry…
Y ahora Harry se dirigía apresurado por un oscuro pasillo siguiendo la estela del corpulento Gregorovitch, que sujetaba un farol en lo alto. Gregorovitch irrumpió en una habitación al final del pasillo y su farol iluminó lo que parecía ser un taller. Virutas de madera y oro brillaban en el oscilante círculo de luz, y en el alféizar de la ventana se hallaba posado, como un pájaro gigante, un joven de cabello dorado. En la fracción de segundo que la luz del farol lo iluminó, Harry vio el placer en su apuesto rostro. Entonces el intruso lanzó un Hechizo Aturdidor con su varita y saltó hacia atrás hasta casi caer por fuera de la ventana con un estallido de risa.

Dumbledore recordó por un momento las facciones de su viejo amigo, (y enamorado en secreto) Gellert Grindelwald, pero descarto ese pensamiento casi de inmediato, evitaba pensar en el siempre que podía

Y Harry se encontró precipitándose de vuelta del interior esas pupilas dilatadas como túneles, y se fijó otra vez en la cara de Gregorovitch, presa del terror.
—¿Quién fue el ladrón, Gregorovitch? —dijo la voz alta y fría.
—No lo sé, nunca lo supe, un hombre joven… no… por favor… ¡POR FAVOR!
Un grito que continuó y continuó y entonces una ráfaga de luz verde…

Lily se estremeció al reconocer el color de la maldición asesina, otra muerte causada por voldemort, cuyo único pecado era no saber quien lo había robado

—¡Harry!
Abrió los ojos, jadeando, con la frente palpitando. Había perdido el conocimiento contra el costado de la tienda, se había deslizado lateralmente por la lona, y estaba tendido en el suelo. Levantó la vista hacia Hermione, cuyo espeso cabello oscurecía el pequeño trozo de cielo visible a través el oscuro enramado situado por encima.
—Estaba soñando —dijo, sentándose con rapidez e intentado responder a la mirada de ira de Hermione con una de inocencia—. Debí quedarme dormido, lo siento.

Sirius contuvo una risa, solo debido a la cara de Lily, estaba seguro de que si hubiese hecho un comentario en ese momento, el apellido Black habría desaparecido para siempre

—¡Sé que fue tu cicatriz! ¡Puedo verlo por tu expresión! Estabas viendo en la mente de Vol…
—¡No digas su nombre! —la voz enfadada de Ron se escuchó desde las profundidades de la tienda.
—Bien —replicó Hermione—. ¡La mente de Quién-tú-sabes, entonces!
—¡No quise hacer que sucediese! —dijo Harry—. ¡Fue un sueño! ¿Puedes tú controlar lo que sueñas, Hermione?
—Si sólo aprendieses a aplicar la Oclumancia…

-Como si fuese algo fácil-dijo sirius

-En especial para alguien como Harry, a quien los sentimientos lo dominan—aportó Dumbledore-en ese campo son su mayor enemigo, pero en su lucha son su mejor arma

Todos apreciaban las palabras de Dumbledore aunque no estaban de acuerdo, ¿Cómo podría el amor o los sentimientos salvar a Harry?, entonces Lily lo recordó, su amor había protegido a su hijo de la maldad de voldemort, era posible que también ayudara a Harry cuando llegara el momento

Pero Harry no estaba interesado en que le regañaran, quería discutir lo que acababa de ver.
—Ha encontrado a Gregorovitch, Hermione, y creo que lo ha matado, pero antes de hacerlo le leyó la mente a Gregorovitch y vi…
—Creo que será mejor que me ocupe yo de la vigilancia si estas tan cansado que te estas quedando dormido —dijo Hermione fríamente.
—¡Puedo terminar mi turno!
—No, obviamente estas agotado. Ve a tumbarte.

-Igual que James y tu-dijo sirius mirando a Lily con burla, pero esta contrario a lo que todos pesaban le replico sonriendo

-¿No se parecerán mas bien a Ángela y a ti cuando discutían en Hogwarts?

Esto silencio a Sirius, el empezó a sentir un interés especial en la chica cuando estaban en sexto, pero debido a todo lo de Voldemort y los tiempos que se vivían en Gran Bretaña su familia había decidido enviarla a Beauxbatons, pensando que allí estaría mas segura, la chica se había negado rotundamente, sin embargo, aun no tenía la mayoría de edad no tuvo otra opción que marcharse, dejando a Lily y Alice, sus mejores amigas, y a sirius a quien también quería.

Hermione se dejó caer en la entrada de la tienda, con expresión testaruda. Enfadado, pero queriendo evitar una discusión, Harry se metió de vuelta en el interior.
La cara de Ron, todavía pálida, se asomaba en la litera de abajo. Harry trepó a la que estaba encima, se tumbó y miró hacia el techo oscuro de lona. Después de un rato, Ron habló en una voz tan baja que no le llegaría a Hermione, acurrucada en la entrada.
—¿Qué esta haciendo Quién-tú-sabes?

-Harry también tiene quien lo siga siempre-dijo James contento

Harry arrugó los ojos con el esfuerzo de recordar cada detalle, y después susurró en la oscuridad.
—Encontró a Gregorovitch. Lo tenía atado. Lo estaba torturando.
—No sé… es raro, ¿verdad?
Harry cerró los ojos, pensando en todo lo que había visto y oído. Cuanto mas recordaba, menos sentido le encontraba… Voldemort no había dicho nada sobre la varita de Harry, nada sobre los núcleos gemelos, nada sobre que Gregorovitch le hiciese una nueva varita mas poderosa para derrotar a la de Harry…
—Quería algo de Gregorovitch —dijo Harry, todavía con los ojos bien cerrados—. Le dijo que se lo diese, pero Gregorovitch dijo que se lo habían robado… y entonces… entonces…

-Saben que es lo peor!—dijo Lily- saber que en alguna parte, Molly esta muerta de preocupación por su hijo, sin saber si lo volverá a ver, o porque dificultades esta pasando, además de pensando en la suerte de Harry y  hermione, los quiere a todos como si fueran sus propios hijos

James asintió, y sirius lamentó haber muerto, dejando a Harry con una misión tan peligrosa, con la única compañía de sus amigos, que aunque leales, no parecían lo suficientemente bien preparados para enfrentar tal reto.

Recordó como él, como Voldemort, había parecido meterse a través de los ojos de Gregorovitch, en sus recuerdos…
—Leyó la mente de Gregorovitch. Vi a un joven posado en el alféizar de una ventana, que le lanzó un hechizo a Gregorovitch y saltó perdiéndose de vista. Lo robó, robó lo que fuese que Quién-tú-sabes buscaba. Y… creo que lo he visto en alguna parte…

-¿Qué lo ha visto?-murmuró atónita Lily- es imposible que lo haya visto, el robo ocurrió hace mucho tiempo

-Tal vez vio alguna fotografía-sugirió Remus-pero no recuerda donde

-Es posible-estuvo de acuerdo la pelirroja

-Eso aún no explica para que quiere voldemort a Gregorovitch

-A no ser—dijo Dumbledore bajito, pero sirius escucho

-A no ser que ¿qué?-preguntó canuto

-Ya han visto como se llama el libro ¿verdad?-dijo Dumbledore- y ya todos conocemos la leyenda—continuo

-Esta insinuando que Voldemort va tras la varita de Sauco-dijo Remus tratando de no ser grosero con Dumbledore-eso es imposible, las reliquias de la muerte no existen

-Existen!-puntualizó Dumbledore-además estoy seguro de que ustedes ya discutieron el porque el libro se titula así, estoy seguro de que no es casualidad

-Pero si de verdad existen—dijo Lily-¿Por qué voldemort no se ha apropiado de ellas?

-Dudo que le interese tener una capa de invisibilidad, o mas aun una piedra que resucite a los muertos, supongo que busca la varita porque es bien sabido que existe una varita con poder excepcional, la mas poderosa de todas-dijo Dumbledore moviendo imperceptiblemente su propia varita

-¿Y dónde esta ahora?-preguntó sirius entusiasmado con la idea

-Creo que no es conveniente que lo sepan por ahora-dijo Dumbledore, y los presentes, como siempre obedecieron sin dudarlo- si haces el honor Remus-murmuró observándolo, y al aludido bajó la vista al libro para seguir leyendo.

Harry deseó poder echar otro vistazo a la cara risueña del muchacho. El robo había sucedido hacía muchos años, según Gregorovitch. ¿por qué el joven ladrón le resultaba familiar?
Los sonidos del bosque que los rodeaba estaban apagados dentro de la tienda; todo lo que Harry podía oír era la respiración de Ron. Después de un rato, Ron susurró: —¿No pudiste ver lo que el ladrón estaba agarrando?
—No… debía ser algo pequeño.
—¿Harry?
Las tablillas de madera de la cama de Ron crujieron cuando cambió de posición.
—Harry, ¿no crees que Quién-tú-sabes esta detrás de algo mas para convertirlo en un Horrocrux?

-Esa también puede ser una posibilidad-opinó James-  ¿no cree señor?

-Es probable-estuvo de acuerdo Dumbledore-aun así, creo mas plausible la otra situación.

James asintió, mientras observaba a Harry siendo abrazado y mimado por Lily, quien ya había terminado de alimentarlo

—No lo sé —dijo Harry despacio—. Quizás. ¿Pero no sería peligroso para él hacer otro? ¿No dijo Hermione que ya había llevado su alma hasta el límite?
—Sí, pero tal vez no lo sabe.
—Sí… tal vez —dijo Harry.
Había estado seguro de que Voldemort buscaba una forma de resolver el problema de los núcleos gemelos, seguro de que intentaba conseguir una solución del viejo fabricante de varitas… y aún así lo había matado, aparentemente sin hacerle ni una pregunta sobre el saber popular sobre varitas.
¿Qué estaba intentando encontrar Voldemort? ¿Por qué, con el Ministerio de Magia y el mundo mágico a sus pies, estaba tan lejos, concentrado en perseguir un objeto que una vez Gregorovitch había poseído, y que había sido robado por un ladrón desconocido?

-Tiene que ser algo lo suficientemente importante como para que Voldemort se aleje de Gran Bretaña-dijo Remus

-Como sabes que no esta en gran Bretaña-preguntó james

-En algún sueño de Harry se menciono, el día de su cumpleaños, y todos sabemos que Gregorovitch no opera en Gran Bretaña

-Tienes razón-dijo james-espero que pronto podamos descubrir de que se trata

Harry todavía podía ver la cara del joven rubio: era alegre, salvaje; tenía un aire pícaro triunfante, como Fred y George. Se había lanzado del alféizar como un pájaro, y Harry lo había visto antes, pero no podía pensar dónde…
Con Gregorovitch muerto, era el mago de expresión alegre el que estaba ahora en peligro. Los pensamientos de Harry se dirigieron hacia él, cuando los ronquidos de Ron empezaron a sonar de la litera de abajo y él mismo se fue quedando una vez mas lentamente dormido.

-Ya es el final-anunció Remus marcando cuidadosamente la pagina en la que había quedado para luego cerrar el libro

-Fue un capitulo tranquilo.-opinó Lily mientras depositaba a Harry en el piso, el pequeño gateo hasta donde se encontraban sus juguetes

-Si—dijo James antes de cambiar de tema- ¿que le diremos a Peter, y quien esconderá el libro?

-Tenemos que tratarlo como siempre, y respecto al libr…

-Lo guardaremos en mi despacho-dijo Dumbledore-conozco el escondite perfecto

Remus se levantó y le dio el libro al director al tiempo que decía

-¿Usaremos la vieja casa de mis padres?

-Si, creo que deberíamos atenernos al plan original-comentó James-pero creo que primero debemos hacer el encantamiento con Sirius en Godric y luego si con Peter, para prevenir

-Desde luego-dijo sirius de inmediato-podemos hacerlo mañana mismo

-Es una magnifica idea-apuntó Remus-y con Pettegrew lo podemos hacer en dos o tres días, de ese modo no sospechará nada

-Yo me retiró—anunció Dumbledore-volveré mañana para realizar el encantamiento, tengo que hacer algunas otras investigaciones

El director salió y después de ultimar los últimos detalles, y de que los hombres tomara un trago fuerte de whiskey de Fuego para tranquilizarse ante el encuentro con Peter, se dispusieron a esperar

Habían pasado unos veinte minutos, cuando por la puerta de la habitación entro un hombrecito con dientes puntiagudos y aparentes signos de nerviosismo, se quitó la capa de viaje al tiempo que decía

-¿Qué hay chicos?, ¿Para qué deseaban verme?-tartamudeó el hombre

Lily miró a su esposo y amigos, estos miraron a Harry y se dispusieron a hablar con quien hasta hace un tiempo consideraban su amigo…

3 comentarios:

  1. Muy bueno, te sigo desde www.potterfics.com, pero como dejaste, te tuve que buscar... estoy medio atrasada pero me encanta igual! besos, escrive mas historias porfavor!!

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  2. por favor comenta mi historia y calificala! http://potterfics.com/historias/89355 gracias!!

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  3. Que difícil debe ser para los chicos enfrentarse a Peter después de lo que se enteraron que les va a hacer.
    Te recomiendo mi historia en fanfiction. Usuario Kira Potter Jackson
    Gabriela

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