domingo, 25 de septiembre de 2011

Capitulo 22. El cuento de los tres hermanos



-Debo decirte que no sé como reaccionaran ante tu presencia—dijo Dumbledore a la persona que le acompañaba—están bastante intrigados sobre a quién voy a llevar.

-Estoy consciente de ello—replicó su acompañante

-¿Has leído ya todo el libro, hasta donde te indiqué?—preguntó Albus señalando la copia que había hecho del libro cuando Lily, james y Remus le enseñaron el libro

-Todo profesor—contestó y de inmediato Albus lo puso lejos de miradas curiosas—debo admitir que me preocupa todo aquello de lo que me he enterado, Voldemort se ve bastante poderoso.

-Como a todos—concedió Dumbledore—tengo unas cuantas estrategias en marcha, sirius y yo tenemos una visita pendiente a una cueva, además de algunas investigaciones que he estado haciendo, esperamos que el libro nos revele cuales son los Horrocruxes restantes

-¿vamos?—inquirió aquella persona nerviosa

Por toda respuesta Albus se encaminó fuera de su oficina seguido de cerca por su acompañante y cuando traspasaron, en completo silencio, las vergas de cerdos alados que señalaban el fin del encantamiento anti-desaparición, Dumbledore giró sobre si mismo con la mano de otra persona firmemente aferrada a su brazo…


Un fénix hizo aparición en medio de aquella habitación de Godric Hallow donde estaban reunidos, acababan de terminar sus bebidas, cuando el patronus llamó la atención de Alice, quien soltó un gritito ahogado señalando la dirección donde el ave acaba de empezar a hablar, todos miraron hacia aquel sitio.

-Sirius—dijo la voz potente de Dumbledore—te estoy esperando en el límite del encantamiento. No tardes

Y acto seguido el patronus se esfumó

-Bien—dijo sirius algo nervioso—creo que es hora de que sepamos quién es nuestro invitado misterioso—y de inmediato salió al encuentro del director.

-Espero que sea alguien de confianza—dijo Alice cuando sirius abandonó la habitación

-Si Dumbledore lo trae—aportó Remus—es suficiente para mí.

-Pero no olvidemos que Dumbledore siempre tiende a confiar en la gente—dijo james preocupado

-No sacamos nada preocupándonos—dijo Lily dejando a Harry en una cuna que habían adaptado al lado de otra para Neville, los niños acababan de comer—esperemos a ver quien es.

Unos gritos empezaron a escucharse afuera, quisieron correr todos, pero Remus, james y Frank dijeron a las mujeres que se quedaran con los niños

-No me pidas que me calme, James—rugía sirius que venía entrando con Dumbledore, Remus, james y Frank, la otra persona se había quedado rezagada—NOS ABANDONÓ!!! Y AHORA ¿VUELVE COMO SI NADA?, NO TE ATREVAS A DECIRME QUE ME CALME, JAMES—Lily consideró un muy mal presagio que sirius llamara a james por su nombre y no por su apodo

-Sirius—intervino el director—debes escuchar todo antes de juzgar nada

-¡ESCUCHAR!!.. ¿!ESCUCHAR!?—Rugió de nuevo, mientras Remus lo sujetaba—tuvo años para venir y explicar, pero no, estamos en guerra, arriesgando el pellejo, un psicópata persigue a Harry, y ¿usted cree que debo escuchar?, perdóneme pero usted francamente esta loco, y no sabe lo que pide—finalizó dando vueltas por toda la habitación

-Lo siento, Sirius—si Lily y Alice ya estaban paralizadas ante la escena, aquella voz las dejó completamente convertidas en hielo, la varita de Alice resbaló de su mano—no tenía mas opción cuando me fui

-Pero en cuanto cumpliste 17 si!!—Gritó sirius con lágrimas en los ojos—yo me fui a los 16 pero tú…

-Sirius!—gritó james, el único a quien sirius medianamente estaba escuchando—tu te fuiste de tu casa porque tu familia seguía la línea de voldemort, en cambio su familia no, solo querían estar a salvo

-Da igual—dijo sirius indignado, nadie parecía querer o poder añadir algo mas—pudo volver cuando cumplió la mayoría de edad, sabía lo que estaba pasando, sabía de la orden del fénix, sabia que estaríamos luchando

-No todo es como parece—intentó de nuevo aquella persona—si me dejaras explicarte, la verdad los he echado mucho de menos—se volvió hacia Lily y Alice—Lily, Alice, ustedes saben que es así, tienen que creerme!—terminó con súplica en su voz

Lily y Alice parecieron despertar de su letargo, y ambas con lágrimas en los ojos, corrieron con los brazos abiertos

-Nosotras también te extrañamos—dijo Lily—nunca vuelvas a dejarnos, Ángela—terminó estrechándola en un abrazo gigante al que Alice se unió de inmediato

-James, Remus, Frank—dijo Ángela llorando—también los he extrañado, y moría de ganas por conocer a Harry y Neville—dijo mirando los niños en la cuna

-Sí, claro, morías de ganas—ironizó sirius

-Sirius—dijo Ángela suplicante—por favor, dame una oportunidad, te juró que todo tiene explicación

-Tuviste mucho tiempo para explicar!—fue la respuesta de sirius

-No cometas una estupidez por tu orgullo—lo reprendió james—deja que explique, y luego júzgala!

-No sabes lo que me pides—dijo con voz mortificada

-Sirius—Dumbledore esperó a que el hombre lo mirara para continuar—te aseguró que Ángela tiene excelentes motivos para no haberte buscado antes.

-Usted lo sabía—acusó sirius—sabía lo que sentía y pensaba respecto a su partida y se quedó callado—le reclamó—parece que siempre será un hombre de secretos, Grindelwald no es mas que la punta del Iceberg!, miente y oculta a todo el mundo con tal de conseguir sus propósitos— escupió con rabia

El director se sobresaltó en su asiento, ni cuando habían leído aquellas horribles cosas sobre su juventud, sirius le había hablado con tanto desprecio y resentimiento.

-Lo siento—dijo Albus con voz derrotada después de uno o dos minutos de silencio—lo siento, tienes toda la razón en juzgarme—la voz del director los con congeló a todos—es mi culpa, no de Ángela, escúchala, dale una oportunidad

Ángela por su parte, aún abrazada por Lily y Alice, lloraba silenciosamente mirando a sirius, sabía que para el sería mas difícil que para los demás, estaban por empezar una relación cuando ella se fue, y sirius Black era un hombre en extremo orgulloso, no sería fácil

-Por favor, sirius—dijo Lily poniéndose en pie y arrodillándose frente a la silla donde el merodeador se había sentado—dale una oportunidad, tanto tú como nosotros queremos saber porque no había vuelto todavía, por favor

-Lily—dijo sirius con lágrimas—le iba a pedir que fuera mi novia el día que vino a decirme que se marchaba—le confesó—iba a dejar mi vida antigua por ella, todo por ella, planee un futuro con ella, al igual que james contigo—las lagrimas brotaban como nunca había visto, se volvió hacia Ángela—y tu llegas y me dices que te vas, que tu familia tiene miedo!—el dolor era palpable en su voz—esperé tus cartas, te envié cartas, y nunca obtuve respuestas!-le reclamó

-Pensé que serías mas feliz si te olvidabas de mí—casi grito Ángela—mis padres me quitaron todo el dinero, no tenían lechuza, Iwen tenía prohibido seguir mis órdenes, vigilaban cada paso que daba y usaron su influencia para que nadie me ayudara económicamente, y el ministro tenía prohibido darme un translador hacia Londres, no tuve forma de volver por mucho tiempo, pero nunca, escúchame bien sirius, nunca he dejado de amarte.

La confesión pareció sorprender a sirius, quien aún tenia sus manos dentro de las de Lily

-Te escuchó—aceptó finalmente

-Gracias!—dijo Ángela—antes que nada debo decirles que volví hace tres meses..Espera, deja que termine!—dijo cuando vio que sirius iba a interrumpirla—mis padres murieron hace cuatro meses, los mortifagos fueron a buscarlos, no sé cómo nos encontraron, papá ya los había rechazado aquí en Londres, fue por eso que nos fuimos, el asunto es  que decidieron matarlos, antes, mamá le ordenó a Iwen que me pusiera a salvo, y el elfo lo hizo—las caras de todos mostraron dolor, sirius se sintió culpable por como la había tratado—tardé un mes en organizar todo, asegurar la casa para evitar que los mortifagos entraran de nuevo, enterrar a mis padres, y tomar posesión del testamento—lágrimas caían por las mejillas de sirius, Lily, Alice y Ángela, mientras que los ojos del director, james, Remus y Frank brillaban de tristeza—volví tan pronto ordené todo, y me puse en contacto con Dumbledore, pues sabía que los padres de james habían muerto, y que ustedes se habían mudado a otro lugar, no sabía dónde buscarlos, por eso fui con Dumbledore—sirius fulminó con la mirada al director—pero entonces me enteré de muchas cosas, todo estaba peor de lo que yo pensaba, voldemort tenía mas poder del que se sabía en Francia, gran Bretaña no podía estar peor, me preocupé, pero Dumbledore me puso al corriente de todo, me dijo que ustedes estaban relativamente bien, me contó sobre Harry y Neville, y la profecía, también lo de los Prewett hace unos días—se estremecieron recordando la muerte de dos buenos hombre, magos y guerreros—y de los otros asesinatos, y entonces, pese a que moría por hablar con ustedes me puse a disposición de Dumbledore, me ofrecí a buscar gente para nuestra causa, había conocido algunos magos y brujas en Francia que se oponían a voldemort.

-¿Por qué no hablar antes con nosotros?—la interrumpió sirius—antes de ir a buscar esos magos

-¿Me habrías dejado ir?—le preguntó Ángela con una sonrisa triste y como sirius no contestó ella siguió—el punto es que partí a reclutar gente, la orden lo necesitaba, así que allí sería útil, le pedí a Dumbledore que no les dijera nada hasta que volviera con los refuerzos, debo confesar que me fue bastante bien, mejor de lo que esperaba

-¿Con ella hablaba cuando decía que tenía que reunirse con alguien?—preguntó james al director

-Así es—le contestó este

-Luego recibí un mensaje de Dumbledore, justo cuando estaba por salir de nuevo—miró al director—me citó urgentemente, y cuando nos reunimos me informó sobre el libro, me instó a leerlo hasta cierto capitulo y ayer me dijo que ya iba a alcanzarlos, me dijo cual era el último capitulo que debía leer, que el no  permitiría que ustedes leyeran mas de eso, y que ya era necesario que nos reencontraramos—miró a sirius con ternura—me contó lo que decían de mi, los comentarios de Lily, y por tu actitud sirius supe que iba a ser difícil que me escucharas, pero también estuve segura de que aún sentías algo por mí

En ese momento sirius no pudo mas, se separó de Lily y llegó junto a Ángela.

-Nunca!—le dijo fervientemente mientras tomaba su manos—jamas!, vuelvas a hacerme esto, no te vuelvas a alejar de mi—y enseguida la besó, con todo el amor, dolor y añoranza que guardaba desde sexto año

-Jamás—prometió Ángela cuando por falta de aire se separaron

Todos los observaban con una sonrisa, Albus de nuevo pensó que no había nada mas maravilloso que el amor.

-Me alegra tenerlos de vuelta—dijo Ángela sentada sobre el regazo de sirius

-También a nosotros—le contestó Remus con una sonrisa radiante

-Creo que ahora deberíamos leer ese libro—opinó Ángela y todos asintieron

-Yo leeré—dijo Frank

Capítulo 21
EL CUENTO DE LOS TRES HERMANOS

-No puedo creer que le vayan a gastar un capitulo a eso—protestó sirius, tan feliz como no se le veía desde hacía mucho tiempo.

-Sirius!—dijo Lily ceñuda pero sonriendo—deja leer

Harry se volvió para mirar a Ron y a Hermione. Ninguno de ellos parecía haber entendido tampoco lo que había dicho Xenophilius
-¿Las Reliquias de la Muerte?

-Sigue siendo extraño que hermione no sepa algo—dijo sirius de nuevo

-Canuto!—dijo James-¿quieres dejar de interrumpir?

-Lo siento cornamenta—dijo sirius para luego depositar un beso en la mejilla de Ángela que seguía en su regazo

-Eso es -dijo Xenophilius-. ¿No han oído hablar de ellas? No me sorprende. Muy, muy pocos magos creen en ellas. Como ese jóven cabeza dura en la boda de tu hermano -se inclinó hacia Ron- !me atacó por ostentar el símbolo del bien conocido Mago Oscuro! Que ignorancia. Al menos no hay nada Oscuro en las Reliquias, no en esencia. Uno simplemente utiliza el símbolo para mostrarse a sí mismo ante los otros creyentes, con la esperanza de que puedan ayudarle en la Búsqueda.

-Es cierto—dijo Remus—había olvidado que Victor casi riñe con el

Dejó caer varios terrones de azúcar en la infusión gurdirraíz y bebió un poco.
-Lo siento. –dijo Harry-. De verdad, todavía no lo entiendo.
Por ser educado, también tomó un sorbo de su taza, y casi se vomita: la cosa estaba bastante asquerosa, como si alguien hubiera licuado Grageas de Sabores de sabor a moco.

-Sí, Lily—dijo Alice—sacó la educación de ti, James habría dicho sin consideración que estaba horrible

-Ey!—protestó el aludido

-Cariño—dijo Lily—sabes que es cierto

Y james no tuvo mas remedio que aceptarlo y Frank riendo siguió leyendo.

-Bueno, verás los creyentes buscan Las Reliquias de la Muerte –dijo Xenophilius lamiéndose los labios, después de tomar otro sorbo de la infusión de guardirraiz, como si no hubiese nada mas delicioso en el mundo

-¿Pero que son Las Reliquias de la Muerte? –preguntó Hermione.
Xenophilius dejó a un lado la vacía taza de té.

-Y se lo bebió todo!!—dijeron james y sirius en perfecta sincronía, bastante sorprendidos.

-¿Doy por supuesto que todos ustedes estan familiarizados con "El Cuento de los Tres Hermanos"?
Harry dijo. "No", pero Ron y Hermione dijeron "Sí". Xenophilius asintió con seriedad.

Todos sonrieron antes el hecho de que Harry fuese el único de los tres amigos que no conociera la fábula

-Bueno, Bueno. Sr. Potter, todo esto empieza con "El Cuento de los Tres
Hermanos"… Tengo una copia en alguna parte…
Miró vagamente por la habitación, hacia los montones de pergaminos y libros, pero Hermione dijo,
-Yo tengo una copia, Señor Lovegood, la tengo aquí mismo.

-Lógico—dijo sirius riendo


Y sacó Los Cuentos de Beedle el Bardo del pequeño bolso de cuentas.
-¿El original? –preguntó Xenophilius con agudeza, y cuando ella asintió, dijo-. En fin, ¿por qué no lo lee en voz alta? Es la mejor forma de asegurar que todos lo entendemos.

-¿Por qué no simplemente le dice a Harry lo que la fábula cuenta?—dijo sirius aburrido—sería mas rápido

-Hermione no desaprovechará la oportunidad de leer algo—aportó james

-Eh... de acuerdo -dijo nerviosamente Hermione. Abrió el libro, y Harry vió que el símbolo que estaban investigando encabezaba la página, mientras ella se aclaraba la garganta y empezaba a leer.
-Había una vez tres hermanos que viajaban al atardecer por un camino solitario y sinuoso.
-A medianoche, mamá decía medianoche -dijo Ron, que había extendido
los brazos detrás de la cabeza para escuchar.

-No creo que sea buena idea interrumpir a hermione—dijo Ángela

-Coincido contigo—la apoyó sirius

-Siempre vas a coincidir con ella, canuto—se burló james

-Y tú siempre lo harás con la pelirroja—contraatacó sirius

-Si, los dos estan atrapados—fue el turno de Remus de burlarse

-Cállate!—rugieron los dos al tiempo, para que sirius continuara—o ¿tengo que recordarte que te casaras con una niña que hoy tiene 7 años?

Remus enrojeció totalmente, y Frank, en medio de risas siguió leyendo

Hermione le lanzó una mirada de enfado.
-¡Lo siento, creo que es mas espeluznante si es medianoche! –dijo Ron.
-Sí, porque necesitamos realmente un poco mas de terror en nuestras vidas –dijo Harry antes de poder contenerse.

-Oh! Harry—se lamentó Lily

-No te preocupes, cielo—dijo james

-Lo sé—aceptó Lily—pero es horrible solo imaginar la vida que ha tenido.

Xenophilius no parecía prestar mucha atención, sino que miraba fijamente el cielo a través de la ventana.
-Continúa, Hermione.
-Con el tiempo, los hermanos alcanzaron un río demásiado profundo para vadearlo y demásiado peligroso para cruzarlo a nado. Sin embargo, estos hermanos habían aprendido las artes mágicas, y con el sencillo ondear de sus varitas hicieron aparecer un puente sobre el agua traicionera.

-Teniendo en cuenta que es una fábula para niños mágicos—dijo Remus—no tiene mucho sentido, el hecho de que magos creen un puente no es nada extraordinario

Iban ya por la mitad del puente cuando encontraron el paso bloqueado por una figura encapuchada. Y la Muerte les habló...

-Siempre me ha causado gracia esa parte—dijo james que al igual que los demás disfrutaba la narración

-Perdón -interrumpió Harry-, pero ¿La Muerte les habló?
-¡Es un cuento de hadas Harry!
-De acuerdo, lo siento, sigue.

-estos dos no aprenden que no deben interrumpir a hermione—dijo Remus

-Y la muerte les habló. Estaba enojada por que le hubieran sido escatimadas tres nuevas víctimas, ya que los viajeros normalmente se ahogaban en el río. Pero La Muerte era astuta. Fingió felicitar a los tres hermanos por su magia, y dijo que cada uno de ellos había ganado un premio por haber sido lo suficientemente listos como para engañarla.

Escuchaban el relato en calma, sirius jugaba con el cabello de Ángela, Remus estaba medio acostado en su silla, mientras james abrazaba cariñosamente a Lily, por su parte Alice recostaba su cabeza en el hombro de su esposo, el director los observaba a todos sonriendo

-Así el hermano mayor, que era un hombre combativo, pidió la varita mas poderosa que existiera, una varita que ganara siempre en los duelos para su dueño, ¡una varita digna de un mago que había vencido a la Muerte! Así que La Muerte cruzó hasta un viejo árbol de Sauco en la ribera del río, dando forma a una varita de una rama que colgaba, y se la entregó al hermano mayor.

-No creo que sea cierto—dijo james, que no vio la mirada del director que sujeto su varita con mas fuerza—las varitas solo son poderosas si lo son los magos que las usan, y son mejores cuando la afinidad mago-varita es óptima

Los demás asintieron de acuerdo.

-Entonces el segundo hermano, que era un hombre arrogante, decidió que quería humillar a La Muerte todavía mas, y pidió el poder de resucitar a los muertos. Así que la Muerte recogió una piedra de la orilla del río y se la dio al segundo hermano, y le dijo que la piedra tenía el poder de traer de vuelta a los muertos.

-¿Crees que si existiera esa piedra, las personas que traigamos de la muerte estarán felices?—preguntó sirius curioso

-No lo creo—contestó el director—la muerte  es algo que ocurre por algún motivo, e ir en su contra es tan anti-natural como asesinar

-Entonces la Muerte preguntó al tercer y mas joven de los hermanos lo que quería. El hermano mas joven era el mas humilde y también el mas sabio de los hermanos, y no confiaba en La Muerte. Así que pidió algo que le permitiera marcharse de aquel lugar sin que la Muerte pudiera seguirle. Y la Muerte, de mala gana, le entregó su propia Capa de Invisibilidad.

-Esa es la parte que mas ridícula me parece—dijo james—si la muerte existiera  no llevaría una capa invisible

-James—dijo Lily divertida—es un cuento de hadas
                                    
-¿La Muerte tenía una Capa de Invisibilidad? –Interrumpió Harry de nuevo.
-Así puede acercarse sigilosamente a las personas, -dijo Ron-. A veces se aburre de correr tras ellos, agitando los brazos y chillando… lo siento Hermione.
-La Muerte se apartó y permitió a los tres hermanos continuar su camino, y así lo hicieron, charlando asombrados sobre la aventura que habían vivido, y admirando los regalos de La Muerte.

James estaba recordando cuando su madre, Dorea Potter le contaba esa fábula, extrañaba a sus padres cada día de su vida

En su debido momento los hermanos se separaron, cada uno hacia su propio destino, El primer hermano viajó durante una semana mas, y alcanzó un pueblo lejano, acompañando a un camarada mago con el que tuvo una riña. Naturalmente con la Varita de Saúco como arma, no podía perder en el duelo que seguiría. Dejando al enemigo en el suelo el hermano mayor avanzó hacia la posada, donde alardeó en voz alta de la poderosa varita que le había arrebatado a la Muerte, y de cómo ésta lo hacía invencible.

-Que imbécil—dijo sirius

-Tú harías lo mismo—se rió Alice—alardearías sobre tu poder

Esa misma noche, otro mago se acercó sigilosamente al hermano mayor que yacía, empapado en vino, sobre la cama. El ladrón tomó la varita y para mas seguridad, le cortó la garganta al hermano mayor.

Se estremecieron al imaginar la escena

Y así la Muerte tomó al primer hermano para sí. Entretanto, el segundo hermano viajaba hacia su casa, donde vivía solo. Allí sacó la piedra que tenía el poder de resucitar a los muertos, y la volteó tres veces en su mano. Para su asombro y su deleite, la figura de la chica con la que una vez había esperado casarse, antes de su muerte prematura, apareció ante él.

Sirius pensó con tristeza las pocas veces que su madre le demostró cariño, le leyó ese cuento, pero eso fue mucho antes de que sirius mostrara que quería seguir un camino diferente.

Pero ella estaba triste y fría, separada de él por un velo. Sin embargo había vuelto al mundo, pero ese no era su sitio y sufría. Finalmente el segundo hermano, impulsado por un loco anhelo desesperado, se mató para reunirse finalmente con ella. Así fue como La Muerte tomó al segundo hermano para sí.

-Qué triste—suspiró Alice


Sin embargo La Muerte buscó al tercer hermano durante muchos años, y nunca pudo encontrarlo. Fue sólo cuando tenía ya una edad avanzada que el hermano mas joven finalmente se quitó la Capa de Invisibilidad y se la dio a su hijo.

-¿Cómo hizo un hijo bajo una capa de invisibilidad?—dijo sirius riéndose estruendosamente

-Sirius!—protestaron Lily, Remus y Alice, pero los demás, el director incluido rieron de la ocurrencia del animago.

Y entonces saludó a la Muerte como a una vieja amiga y fue con ella gustosamente, e igualmente, pasó a mejor vida.
Hermione cerró el libro. Pasó un momento o dos antes que Xenophilus pareciera darse cuenta que había dejado de leer, luego apartó la vista de la ventana y dijo:
-Bien ahí las tienen

-Vaya que habla con claridad—se burló james

-¿Perdón? –dijo Hermione, que parecía confundida.
-Esas son las Reliquias de la Muerte -dijo Xenophilus.
Agarró una pluma de la atestada mesa a su vera, y sacó un pedazo roto de pergamino de en medio de otros libros.
-La Varita de Saúco -dijo dibujando una línea vertical sobre el pergamino-. La Piedra de Resurrección, -dijo añadiendo un círculo encima de la línea-. La Capa de Invisibilidad, -terminó incluyendo la línea y el círculo dentro de un triángulo, para dibujar el símbolo que tanto intrigaba a Hermione-. Unidas -dijo- Las Reliquias de la Muerte.

-Tonterías—dijeron al unísono

-Pero no se mencionan las palabras "Reliquias de la Muerte" en la historia –dijo Hermione.

-Para ser tan brillante—dijo Remus—aquí realmente falló la inteligencia de hermione.

-Bueno, claro que no -dijo Xenophilius, exasperantemente pagado de sí mismo-. Eso es un cuento de niños, para divertir a la vez que instruir. Aquellos de nosotros que entendemos de estas materias, sin embargo, reconocemos que esa antigua historia hace referencia a los tres objetos, o Reliquias, las cuales, reunidas, convierten a su dueño en el amo de la Muerte.
Hubo un corto silencio en el cual Xenophilius miró por la ventana.
El sol ya estaba bajo en el cielo.
-Luna debería tener pronto bastantes Plimpies -dijo quedamente.

-Es cierto!—gritó Lily—me había olvidado de luna!

-Ya ha pasado demasiado tiempo—aportó Remus ganándose una mirada de reproche de james

-Sigue leyendo Frank—le dijo Alice a su esposo

-Cuando usted dice "amo de la Muerte"… -dijo Ron.
-Amo, -dijo Xenophilius, agitando una mano en el aire-. Conquistador, Vencedor. El término que prefiera.
-Pero entonces… quiere decir… -dijo lentamente Hermione, y Harry podía ver que estaba intentando eliminar de su voz cualquier rastro de escepticismo-, que usted cree que esos objetos (esas Reliquias) ¿realmente existen?
Xenophilius alzó las cejas otra vez.
–Por supuesto.
-Pero -dijo Hermione, y Harry podía oír como su contención empezaba a
agrietarse-, Sr. Lovegood, ¿cómo puede usted creer…?

-Cree porque es Lovegood!—dijo sirius con sencillez—el siempre cree cosas imposibles

-Luna me ha hablado sobre ti, jovencita, -dijo Xenophilius-. No es usted poco inteligente, pero esta dolorosamente limitada. Estrecha de miras.
De mente cerrada.
-Quizas deberías probarte el sombrero, Hermione -dijo Ron, inclinándose hacia el absurdo tocado. Su voz temblaba por la tensión de evitar reírse.

Pero los lectores no pudieron evitar reír, y fueron algunos los minutos requeridos para parar la risa y que Frank pudiese leer de nuevo

-Señor Lovegood -empezó otra vez Hermione-, Sabemos que existen cosas como las Capas de Invisibilidad. Son raras, pero existen. Pero…
-¡Ah, pero la Tercera Reliquia es una verdadera Capa de Invisibilidad, Señorita. Granger! Quiero decir que, no es una capa de viaje imbuida con un Encantamiento de Desilusión, o portadora de un Hechizo de Bedazzling, o algún tejido del pelo de Demiguise, el cual le esconde a uno al principio pero se marchita con los años hasta que se vuelve opaco. Estamos hablando de una capa que realmente vuelve al que la lleva completamente invisible, y dura eternamente, proporcionando constante e impenetrable ocultamiento, sin importar que hechizos le lancen. ¿Cuántas capas como esa ha visto, Señorita Granger?

-La mia!—gritó james triunfal y el director le sonrió, si ese muchacho supiera que tiene una de las reliquias de la muerte en su poder desde que era muy joven.

-Así es cornamenta—apoyó sirius—la mejor capa del mundo

-La mejor—estuvo de acuerdo Remus.

Hermione abrió la boca, luego la cerró otra vez, parecía mas confundida que nunca. Ella, Harry y Ron se miraron entre ellos, y Harry sabía que todos estaban pensando lo mismo. Sucedía que una capa exactamente como la que Xenophilius había descrito había estado en la habitación con ellos en todo momento.
-Exactamente -dijo Xenophilius, como si los hubiera derrotado con su razonada argumentación.

-Me pregunto cómo hermione pude se tan amiga de Luna—opinó Lily—es obvio que son polos opuestos, es decir, luna es hija de Xenophilius, ósea creerá en cosas extrañar e imaginarias, mientas que hermione es razón pura

-Tal vez es porque ambas apoyan a Harry—opinó Alice—porque las dos, pese a sus diferencias se han unido a Harry en su causa

-Sea como sea—dijo james—no me cansó de agradecer que mi hijo tenga tan buenos amigos.

-Ninguno de ustedes ha visto nunca tal cosa. El poseedor sería inconmensurablemente rico, ¿no? -Miró a través de la ventana de nuevo. El cielo estaba ahora teñido de un leve vestigio de rosado.

-¿Cómo una capa invisible le haría rico?—preguntó Ángela—es decir, a menos que se dediqué a robar sin que lo vean, lo cual no tendría sentido

-Lo que dice Lovegood generalmente no tiene sentido—le recordó sirius

-De acuerdo -dijo Hermione, desconcertada-. Digamos que la Capa existe… ¿Qué hay de la piedra, Señor Lovegood? ¿Eso que usted llama la Piedra de Resurrección?
-¿Qué hay de eso?
-Bien, ¿cómo puede ser eso real?
-Pruebe que no lo es -dijo Xenophilius.
Hermione parecía indignada.
-Pero eso es… lo siento, ¡pero es completamente ridículo! ¿Cómo puedo probar que no existe? ¿Espera de mí que recoja… todos los guijarros del mundo y los pruebe? Es decir, ¡puede afirmar que todo eso existe con la única base para creer en ello el que nadie puede probar que no existen!

-Creo que eso no hará más que alentar a Lovegood—dijo Remus riendo, recordando su época de colegio

-Sí, puedo -dijo Xenophilius-. Me alegra ver que ha abierto un poco su mente.
-Y la Varita de Saúco, -dijo Harry rápidamente, antes de que Hermione pudiera replicar-, ¿piensa usted que también existe?
-Oh, bien, en ese caso hay interminables pruebas -dijo Xenophilius-. La Varita de Saúco es la Reliquia a la que resulta mas fácil seguirle la pista, por la forma en que cambia de mano.

-Aquí tengo que darle la razón—aceptó Lily

-¿Qué quieres decir?—preguntó sirius

-A través de la historia son innumerables las historias que hablan de una varita de peculiar poder—contestó Remus en lugar de Lily.

-¿Qué es? –preguntó Harry.
-Que consiste en que el poseedor de la varita debe quitársela a su propietario anterior, si es verdaderamente el amo de la misma -dijo Xenophilius-. ¿Seguramente has oído hablar de como la varita llegó a Egbert el Ilustre, tras matar salvajemente a Emeric el Malvado? ¿De cómo Godelot murió en su propio sótano después de que su hijo, Hereward, le robara la varita? ¿Del horrible Loxias, que robó la varita a Baraabas Deverill, al cual había asesinado? La sangrienta huella de la Varita de Saúco esta salpicada a través de las páginas de la historia de la Brujería.

-Se los dije—Remus miró a Lily sonriendo

-Sí, lunático—dijo sirius rodándolo los ojos—tú lo sabes todo

Harry echó un vistazo a Hermione. Que miraba con el ceño fruncido a Xenophilius pero no le contradecía.
-¿Y dónde cree que esta ahora la Varita de Saúco? –preguntó Ron.
-Desgraciadamente, ¿Quién lo sabe? –contestó Xenophilius, mientras echaba un vistazo por la ventana-. ¿Quién sabe dónde yace escondida la Varita de Saúco? La huella se enfría con Arcus y Livius. ¿Quién puede decir cual de ellos realmente derrotó a Loxias, y quién tomó la varita? ¿Y quien puede decir quien los derrotó a ellos? La historia, desgraciadamente, no nos lo cuenta.

Lily estaba pendiente de la cara de sirius y Ángela, si bien la actitud de sirius siempre había sido bromista y divertida, pero ahora, junto a Ángela se veía simplemente rebosante de felicidad y sus ojos brillaban mas que nunca, la pelirroja se sintió feliz por sus dos amigos

Hubo una pausa. Finalmente Hermione preguntó tensa,
-Señor Lovegood, ¿tiene algo que ver la familia Peverell con las Reliquias de la Muerte?
Xenophilius pareció desconcertado y algo se agitó en la memoria de Harry, pero no lo podía localizar. Peverell… había oído antes ese nombre…

-Por supuesto que lo oyó antes—se exasperó Remus—en aquella tumba del cementerio de Godric

-El no tiene la memoria fotográfica de hermione—lo defendió Lily

-Pero si no ha pasado nada de tiempo desde que la vieron

-Si—dijo james serio—pero creo que lo que paso después opaca el haber leído un nombre en una tumba.

El recuerdo de lo ocurrido en Godric Hallow causó un escalofrió en todos, Ángela había llorado en el despacho del director, cuando sola, en aquella habitación había leído la muerte de una de sus mejores amigas y de su esposo, a quien también quería con el alma


-¡Pero usted me ha estado induciendo a error, jovencita! –dijo Xenophilius, sentándose ahora mucho mas derecho en la silla y mirando con ojos saltones a Hermione-. ¡Pensaba que era nueva en la Búsqueda de las Reliquias! ¡Muchos delos Buscadores creemos que los Peverells tienen mucho… mucho... que ver conlas Reliquias!
-¿Quiénes son los Peverells? –preguntó Ron.
-Ese era el nombre grabado en la tumba que tenía la marca, en el Valle de Godric, -dijo Hermione, sin apartar la vista de Xenophilius-. Ingnotus Peverell.
Un nuevo estremecimiento, la sombra de la futura muerte de los Potter seguía presente en todos ellos,  causaba malestar en cada uno

-¡Exactamente! –dijo Xenophilius, con el dedo índice alzado con pedantería-.¡El signo de las Reliquias de la Muerte en la tumba de Ignotus es una prueba definitiva!
-¿De qué? –preguntó Ron.
-¡De qué, esos tres hermanos de la historia fueran de hecho los tres hermanos Peverell, Antioch, Cadmus e Ignotus! ¡Qué ellos fueron los primeros propietarios de Las Reliquias!

-Solo pierden su tiempo—dijo Remus—deberían centrarse en los Horrocruxes

-Pero si fuiste tu el que dijo que debían seguir todas las pistas que tuviesen—le recordó james

-Sí—contestó Remus—y lo sostengo, pero una vez que vean que una pista no lleva a ningún lado, deben descartarla

Echando otra mirada hacia la ventana se levantó, y recogió la bandeja, encaminándose hacia la escalera de caracol.
-¿Se quedarán a cenar? –les gritó, mientras desaparecía escaleras debajo de nuevo-.Todo el mundo nos pide la receta de la sopa de Plimply agua dulce

-Seguro para denunciarlos ante el departamento de toxicología de San Mungo—dijo sirius riendo

-Seguramente para mostrarla en el Departamento de toxicología de Mungo –dijo Ron en voz baja.

-Parece que te pareces mas a Ron de lo que piensas—dijo Lily con malicia y todos estallaron en carcajadas, sirius incluido

Harry esperó hasta que pudieron oír a Xenophilius moverse en la cocina escaleras abajo antes de hablar.
-¿Tú qué piensas? –le preguntó a Hermione.
-Oh, Harry, -dijo ella con cansancio-, es un absoluto montón de basura. Esto no puede ser lo que realmente significa el signo. Debe ser su extraña manera de asumirlo. Qué pérdida de tiempo.

-Tampoco es como si tuvieran múltiples compromisos sociales, para decir que perdieron el tiempo—dijo Ángela riendo

-Supongo, este es el hombre que nos trajo los Snorkacks de Cuerno arrugado - dijo Ron.
-¿No creíste tampoco en eso? –le preguntó Harry.

-Por supuesto que no—dijo Alice—es un montón de tonterías, es decir, si ese es el significado del símbolo, pero es solo una leyenda

Dumbledore ya se había cansado de decirles que lastimosamente esos objetos si existían, y ellos no estaban dispuestos a creerlo, así que no insistiría en el tema

-No, esa historia es de esas cosas que cuentas a los niños como moralejas, ¿no? ¡No busques problemas, no busques peleas, no hagas el tonto con esas cosas es mejor dejarlo en paz! Sólo mantén la cabeza gacha, ocúpate de tus asuntos y todo irá bien. Piensa en ello -añadió Ron-, quizás es por esas historias por lo que se cree que las varitas de saúcos supuestamente traen mala suerte.
-¿De qué estas hablando?

-Es cierto—dijeron Alice, Lily y Ángela al tiempo


-Una de esas supersticiones, ¿verdad? "Las brujas nacidas en mayo se casarán con muggles" "Embrujada al atardecer, desembrujada a medianoche" "La varita de sauco, mucha sombra y poco truco" Tienes que haberlas oído. Mi madre tiene un montón.
-Harry y yo hemos crecido entre muggles, -le recordó Hermione-. Nos enseñaron otras supersticiones. –Suspiró profundamente cuando un olor mas bien acre ascendió desde la cocina. La única cosa buena de su exasperación con Xenophilius era que parecía haber olvidado que estaba enfadada con Ron-. Creo que estas en lo cierto, -le dijo–. Sólo es una moraleja, es obvio qué regalo es el mejor, el que uno escogería…

-La varita—dijeron james, Frank y sirius al tiempo

-La piedra—dijeron Lily, y Ángela al tiempo, pensando en sus padres

-La capa—escogieron Alice y Remus

Todos se miraron y rieron  pero no hicieron comentarios al respecto

Los tres hablaron al mismo tiempo: Hermione dijo,
-la Capa,
Ron dijo,
-La Varita,
Y Harry,
-La Piedra.

-Al parecer no somos los únicos que pensamos diferente—dijo Alice divertida

-Todos pensamos diferente—dijo el director, que como siempre que las reliquias eran nombradas se sentía triste y recordaba a su hermana Ariana

Se miraron, medio sorprendidos, medio divertidos.
-Se suponía que dirías la Capa, -le dijo Ron a Hermione-, pero no necesitas ser invisible si tienes la varita. Una varita invencible, Hermione, ¡vamos!
-Ya tenemos una Capa de Invisibilidad, -dijo Harry.

-La mejor que pueden tener—dijeron al tiempo los tres merodeadores

Los otros los miraron divertidos, a todos les alegraba la profunda y solidad amistad que unía a esos tres, cualquiera de ellos sería capaz de dar la vida por el otro.

-¡Y nos ha ayudado bastante, por si no se habían dado cuenta! – respondió Hermione

-Por supuesto que ayuda!!—dijo sirius riéndose—esa capa, junto con el mapa, es la causa del éxito de los merodeadores

- Mientras que la varita atraería problemas…-finalizó
-Solo si lo das a conocer, -argumentó Ron-. Sólo si fueras lo bastante idiota como para ir a bailando y cantando, agitándola sobre tu cabeza, "tengo una varita invencible, inténtalo si crees que eres lo bastante fuerte". Mientras mantengas la boca cerrada...

-El problema, si esa varita existiera—dijo Lily—sería precisamente ese, mantenerlo en secreto

Dumbledore sonrió imperceptiblemente.

-Si, ¿pero podrás mantener tú la boca cerrada? –dijo Hermione, con escepticismo- . ¿Sabes que la única cosa auténtica que nos ha dicho es que ha habido tres historias sobre varitas súper poderosas en centenares de años.
-¿Las hay? –preguntó Harry.
Hermione parecía exasperada. La expresión era tan encantadoramente familiar que Harry y Ron se sonrieron mutuamente.

Todos rieron de la frase de Harry, y ante el hecho de que algo tan simple como una expresión logrará que los chicos sonrieran.

-La Varita de la Muerte, la Varita del Destino, surgen bajo nombres diferentes a lo largo de los siglos, normalmente en posesión de algún Mago Oscuro que alardea de ellas. El profesor Binns mencionó alguna cosa, pero… oh, todo esto es una tontería.

-¿Cómo es posible que recuerde lo que ese aburrido fantasma dice?—dijo sirius realmente sorprendido

-Qué tu no pongas atención no significa que nadie mas lo haga—le replicó Lily

-Cielo lo siento—dijo james—pero es realmente raro que alguien le escuche, hasta tu tenias problemas para concentrarte de vez en cuando en esa clase

Lily no tuvo otra opción que aceptar lo que su esposo decía, la verdad es que Binns era realmente aburrido y monótono, los merodeadores habían aprendido mas en la biblioteca, a donde Remus los había arrastrado una que otra vez, y desde que james empezara a salir con Lily, también ella.

Las varitas sólo tienen tanto poder como los magos que las utilizan. A
algunos magos simplemente les gusta alardear de que las suyas son mas grandes y mejores que las de los demás.

-Coincido contigo hermione—Remus se mostró de acuerdo

-¿Pero cómo sabes, -dijo Harry- que esas varitas... la Varita de la Muerte y la Varita del Destino... no son la misma varita, saliendo a la superficie a lo largo de los siglos bajo diferentes nombres?
-¿Qué pasa si realmente todas ellas son la Varita de Saúco, fabricada por la Muerte? –dijo Ron.

-Que tontería—dijo Alice entre dientes

Harry rió. La extraña idea que se le había ocurrido era después de todo, ridícula. Su varita, se recordó, estaba hecha de acebo, no de saúco, y había sido fabricada por Ollivander, hiciera lo que hiciera esa noche en que Voldemort le había perseguido a través de los cielos; y si hubiera sido invencible, ¿cómo podría haberse roto?

Todos recordaron la actitud de la varita aquel día, era un misterio que ni siquiera Dumbledore había podido aclarar, pese a los núcleos centrales idénticos, lo que paso aquel día era realmente increíble.

-¿Entonces por qué escogerías la piedra? –le preguntó Ron.
-Bueno, si pudiera traer a la gente de regreso, podríamos tener a nuestro lado Sirius… Ojoloco… Dumbledore… a mis padres…

De la intriga pasaron a la tristeza, la cantidad de muertes que Harry había tenido que sufrir, de forma trágica, a tan corta edad, era alarmante, y sabían que pese a que el chico no lo expresara todos sabían lo mucho que Harry extrañaba a todos su seres queridos.

Ni Ron ni Hermione sonrieron.
-Pero según Beedle el Bardo, ellos no querían volver, ¿no? –dijo Harry, pensando en el cuento que acababan de escuchar-. No creo que haya muchas otras historias sobre piedras que puedan resucitar a los muertos, ¿las hay? –preguntó a Hermione.
-No -replicó ella tristemente-. No creo que nadie excepto el Señor Lovegood pudiera engañarse a sí mismo creyendo que es posible. Probablemente Beedle tomó la idea de La Piedra filosofal; ya sabes, en vez de una piedra que te hiciera inmortal, una piedra que invirtiera la muerte.

-¿Cómo es que saben de la piedra filosofal?—inquirió Lily—son contados los magos que lo saben

-ya sabemos que Harry se las arregla para esta metido en todo—dijo sirius sonriendo—después de todo es un merodeador.

El olor de la cocina se hacía mas fuerte. Algo así como a calzoncillos quemados. Harry se preguntó si le sería posible comer algo de lo que Xenophilius estaba cocinando para no herir sus sentimientos.

-Bien pensado Harry—lo felicitó Lily—demuestra que eres un caballero.

-¿Sin embargo, qué hay de la Capa? –dijo Ron lentamente-. ¿No te das cuenta, él esta en lo cierto? He utilizado la Capa de Harry y sé como funciona, nunca me detuve a pensarlo. Y nunca he oído hablar de ninguna como la de Harry. Es infalible. Nunca hemos sido divisados bajo ella…

-Porque son invisibles cuando la llevan!—dijeron con burla james y sirius.

-¡Por supuesto que no… somos invisibles cuando estamos bajo ella, Ron!
-Pero todas esas cosas que él dijo sobre las otras capas, y no eran precisamente de diez Knuts, sabes, ¡es cierto! Nunca se me había ocurrido antes pero he oído bastante respecto a encantamientos sobre capas que cuando envejecían, o eran desgarradas por hechizos tenían agujeros, la de Harry pertenecía a su padre, por lo tanto no es precisamente nueva, ¡pero se conserva... perfectamente!

-Es cierto—dijo james cayendo en cuenta

-y podemos asegurar que tu abuelo también llegó a usarla—dijo sirius

-Es verdad—apoyó Remus—tu padre te dijo que era una herencia que pasaba de generación en generación

-Siempre supe que mi capa era especial—dijo con arrogancia james, Lily rodó los ojos.

-Bien, de acuerdo, pero Ron, la piedra…
Mientras ellos discutían entre susurros, Harry se paseaba por la habitación, escuchando a medias. Alcanzó la escalera de caracol, alzó distraídamente los ojos hacia el siguiente piso y se distrajo un vez mas.
Su propia cara lo miraba desde el techo de la habitación. Tras unos momentos de desconcierto, se dio cuenta de que no era un espejo, si no una pintura.

-¿Una qué?—dijeron todos al tiempo

-Una pintura—repitió Frank

-Que extraño—opinó Ángela-¿qué hace una pintura de Harry en la casa de los Lovegood

-Tal vez luna esta enamorada de el—propuso sirius

-No lo creo—contradijo Lily—Harry esta enamorado de Ginny, y luna y Ginny son amigas según sabemos, debe ser por otra cosa. Frank continua por favor.

Curioso, empezó a subir las escaleras.
-Harry, ¿qué estas haciendo? ¡No creo que debas mirar por aquí cuando él no esta!
Pero Harry ya había alcanzado el siguiente nivel. Luna había decorado el techo de la habitación con cinco preciosas caras pintadas: Harry, Ron, Hermione, Ginny y Neville. No se movían como en las fotos de Hogwarts, pero había una cierta magia en ellos. Harry creyó que respiraban. Lo que parecía ser una fina cadena dorada se tejía alrededor de las pinturas uniéndolas, pero tras examinarlas durante un minuto o mas, Harry se percató que la cadena era una palabra repetida miles de veces en tinta dorada : amigos… amigos… amigos…

-Es un detalle hermoso—dijo Lily conmovida

-Si—estuvo de acuerdo Alice—es realmente bello

-Parece que no son solo los weasley y hermione quienes apoyan a Harry—dijo Remus

-Además de toda la orden—aportó Ángela

-Mi hijo no esta solo—dijo james sonriendo—los Potter siempre somos bendecidos por Merlín con buenos amigos, los mejores del mundo—dijo mirando a Remus y sirius quienes sonrieron abiertamente.


Harry sintió una gran corriente de afecto hacia Luna. Estudió la habitación. Había una gran fotografía junto a la cama, de una joven Luna y una mujer a la que se parecía mucho. Se abrazaban. Luna parecía bastante mejor vestida en esa foto de lo que Harry la había visto en su vida.

-Debió ser difícil para xenophilus perder a su esposa y criar a luna el solo—dijo Alice con tristeza que no imaginaba su vida sin Frank al lado.

La foto estaba cubierta de polvo. Eso le pareció a Harry un poco raro. Miró alrededor. Algo iba mal.

Se tensaron, si antes ya les había parecido extraña la ausencia de luna, el hecho de que Harry pensara que algo iba mal activaba todas sus alarmas

La pálida alfombra azul estaba también cubierta de polvo. No había ropa en el armario, las puertas estaban entreabiertas. La cama tenía una apariencia fría y antipática, como si no se hubiera dormido en ella durante semanas. Una solitaria telaraña se extendía a través de la ventana cruzando el cielo rojo sangre.

-Es una trampa—se desesperó Lily—lo sabía

-Cálmate Lily—dijo Ángela—Frank por favor sigue la lectura

-¿Qué ocurre? –preguntó Hermione mientras Harry descendía las escaleras, pero antes de que pudiera responderle, Xenophilius alcanzó los escalones superiores llegando desde la cocina, ahora trayendo una bandeja cargada con tazones.
-Señor Lovegood, -dijo Harry-. ¿Dónde esta Luna?
-¿Perdón?
-¿Dónde esta Luna?

Lily miraba con concentración el libro, como si de esa forma pudiese enterarse de que iba a pasar antes de que Frank leyera.

Xenophilius se detuvo en el último escalón.
-Ya… se los he dicho. Esta abajo en el Puente pescando Plimpies.
-¿Entonces por qué ha preparado esa bandeja sólo para cuatro?

-Siempre he dicho que el instinto de Harry es bastante acertado—dijo Remus—ni hermione se ha dado cuenta de eso


Xenophilius intentó hablar, pero no le salió ningún sonido. El único ruido que se oía era el traqueteo continuado de la imprenta, y un leve repiqueteo en la bandeja cuando las manos de Xenophilius temblaron.
-No creo que Luna haya estado aquí desde hace semanas. –dijo Harry-. Su ropa no esta, no ha pasado la noche en su cama. ¿Dónde esta? ¿Y por qué mira continuamente hacia la ventana?

-Los van a atrapar!—casi gritó Lily, presa de la ansiedad, su esposo la abrazo, mientras sirius hacia lo propio con Ángela y Alice tomaba el brazo de su esposo

Xenophilius dejó caer la bandeja. Los tazones rebotaron y se hicieron pedazos. Harry, Ron y Hermione sacaron sus varitas. Xenophilius se quedó congelado a punto de meter la mano en el bolsillo. En ese momento la imprenta hizo un enorme ruido y numerosos “El Quisquilloso” salieron en tropel a través del suelo desde debajo del mantel, al menos la imprenta se quedó en silencio. Hermione se detuvo y recogió una de las revistas, todavía con la varita apuntando al Señor Lovegood.
-Harry, mira esto.

-Maldito traidor—rugió sirius con rabia—lo voy a hace trizas

-Cálmate, cielo—dijo Ángela y su solo roce calmó al merodeador.

Se acercó a ella tan rápido como pudo a través de todo el desorden. La portada de El Quisquilloso llevaba su foto, adornada con las palabras "Indeseable Numero Uno" y con la recompensa al pie de foto.

-Canalla cobarde—dijo Remus con rabia, fulminando el libro con la mirada como si este tuviese la culpa de lo que Lovegood había hecho.

-¿Entonces, El Quisquilloso opta por un nuevo punto de vista? –preguntó Harry fríamente, con la mente trabajando a toda máquina-. ¿Qué hizo usted cuando fue al jardín, Señor Lovegood? ¿Enviar una lechuza al Ministerio?

-Salgan de allí—dijo Lily al borde de la histeria—no se porque se quedan a platicar, tienen que irse antes de que los mortifagos lleguen

-Saldrán de eso, cielo—la tranquilizó james—ya lo verás, tiene tu tenacidad y tu inteligencia

-Además de tu poder y tu instinto—le concedió Lily un poco mas tranquila

Xenophilius se lamió los labios.
–Me quitaron a mi Luna -susurró-, A causa de lo que estaba escribiendo. Me quitaron a mi Luna y no se donde esta, qué le han hecho. Pero me la devolverán si yo… si yo…

-Lo sabía—dijo Lily—sabía que algo había pasado por luna, pobre hombre

-No puedo creer que lo defiendas—le reclamó james con calma

-No lo hago—se defendió ella—lo entiendo, me volvería loca si me quitaran a Harry, pero no significa que este de acuerdo con lo que esta haciendo.

-¿Entrega a Harry? –terminó Hermione por él.
-Ni hablar. –Dijo Ron rotundamente-. Apártese de nuestro camino, nos vamos.
Xenophilius estaba pálido como la cera, como si tuviera cien años, sus labios  retrocedieron con espantosa malicia.

-Esta completamente trastornado—dijo Remus con lastima

-Yo solo espero que Luna este bien—dijo Ángela

-Si—estuvo de acuerdo Alice—esa pobre chica no tiene que pagar por estar a favor de Harry

-Lo verdaderamente preocupante—dijo Dumbledore—es que los mortifagos secuestren jóvenes como castigo, esos seres no tienen remedio

-Son unas malditas sanguijuelas asquerosas—escupió sirius con asco—pero ya verán, tendrán su merecido cuando su asqueroso líder caiga.

-Estarán aquí de un momento a otro. Tengo que salvar a Luna. No puedo perder a mi Luna. No pueden irse!
Extendió los brazos frente a la escalera, y Harry tuvo la repentina visión de su madre haciendo lo mismo frente a su cuna.

Todos saltaron en sus asientos, al recordar la escena de la muerte de los Potter, a Lily frente a la cuna de Harry suplicándole a voldemort por piedad para su hijo, una rabia profunda los invadió.

-No nos obligue a hacerle daño, -dijo Harry-. Apártese de nuestro camino, Señor Lovegood.
-¡Harry! –gritó Hermione.
Figuras con escobas pasaban volando ante de las ventanas.

-¿Qué demonios esperan?—dijo Remus—tienen que salir de allí, ya mismo

Cuando los tres apartaron de él la mirada, Xenophilius sacó la varita. Harry se percató de su error justo a tiempo. Se lanzó a un lado, empujando a Ron y a Hermione fuera de peligro mientras el Hechizo Contundente de Xenophilius se alzaba por la habitación y golpeaba el cuerno del Erumpent.

Frank leía con total atención, concentrado en pronunciar claramente, pero con rapidez debido al deseo de saber cómo terminaría todo

Hubo una explosión colosal. Por el sonido parecía que hubiera explotado la habitación. Fragmentos de madera, papel y escombros volaban en todas direcciones, junto con una nube impenetrable de espeso polvo blanco. Harry voló por los aires, chocando luego contra el suelo, incapaz de ver mientras los escombros llovían sobre él, con los brazos sobre la cabeza. Oyó el grito de Hermione, el alarido de Ron, y una serie de escalofriantes ruidos metálicos que le informaron de que Xenophilius había perdido pie y caído por las escaleras de caracol.

Todos estaban preocupados por la suerte de los tres amigos, aunque nadie tanto como Lily, quien no veía forma de que salieran de allí, en medio de una explosión y con los mortifagos allí

Medio enterrado en los escombros, Harry trató de levantarse. A penas podía respirar o ver a causa del polvo. La mitad del techo había caído y un extremo de la cama de Luna colgaba por el agujero.

Con Harry enterrado en los escombros y sin señales aparentes de ron y hermione, la tensión de todos aumentó a niveles críticos

El busto de Rowena Ravenclaw yacía a su lado con la mitad de la cara ausente, fragmentos de pergamino roto que flotaban en el aire, y la mayor parte de la imprenta yacía a su lado, bloqueando la parte superior de las escaleras hacia la cocina. Entonces otra forma blanca se movió a su lado, y Hermione, cubierta polvo como una segunda estatua, se presionó el dedo contra los labios. La puerta de abajo se abrió de golpe.

No sabían porque, pero pensaban y de hecho estaban seguros de que hermione ya tenia un plan en mente para sacarlos de allí sanos y salvos

-¿No te dije que no había necesidad de correr, Travers? –dijo una voz áspera-. ¿No te dije que este chiflado esta tan loco de atar como de costumbre? –Se oyó un golpe y un grito de dolor provenientes de Xenophilius.
-¡No… no… arriba… Potter!

-Infeliz!—dijo sirius enojado pero nadie le hizo caso y Frank, como si no hubiese oído nada siguió leyendo.

-Te lo dije la semana pasada Lovegood, ¡que no íbamos a volver por nada menos que algo de información sólida! ¿Recuerdas la semana pasada? ¿Cuando querías intercambiar a tu hija por ese estúpido sombrero ridículo? Y la semana anterior (Otro golpe, otro chillido) ¿cuando creías que te la entregaríamos si nos ofrecías la prueba de que existían los Snornack (golpe) de cuerno (golpe) arrugado?

A pesar de que sentían pena por el hombre, y miedo por la suerte de Luna, no consideraban siquiera la opción de que Harry fuese atrapado.

-¡No… no… se lo suplico! –Xenophilius sollozó-. ¡Realmente es Potter, de verdad!
-¡Y ahora resulta que sólo nos ha llamado aquí para tratar de hacernos estallar! - rugió el mortífago, y hubo una descarga de golpes intercalados con los gritos de agonía de Xenophilius.

Lily pensó que pese a que Harry no se dejaría atrapar, su hijo estaba muy preocupado por la suerte de Luna, después de todo era su amiga, y Harry odiaba que la gente que quería se expusiera a algún peligro por su causa, prueba de ello era su actitud cuando le mencionaron el plan de los 7 Potter y cuando supieron la razón por la cual dejo a Ginny pese a amarla profundamente.

-El lugar parece a punto de caerse, Selwyn, -dijo fríamente una segunda voz, resonando hacia a las escaleras destrozadas-. Las escaleras estan completamente bloqueadas. Tratar de despejarlas podría derribar el lugar.
-Estas mintiendo pedazo de porquería. –gritó el mago llamado Selwyn.
-Nunca has visto a Potter en tu vida, ¿verdad?. Creo que nos has atraído aquí para matarnos, ¿no? ¿Y piensas que así recuperarás a tu niña?

-Ratas asquerosas—dijo esta vez james—como pueden decirle eso, ES SU HIJA!

-Esos canallas no respetan nada, james—dijo Remus con asco—entregarían a sus propios hijos si Voldemort se los pidiera

-¡Lo juro… lo juro… Potter esta arriba!
-Homenum revelio. –dijo la voz al pie de las escaleras. Harry oyó el grito
sofocado de Hermione, y tuvo la extraña sensación de que algo estaba bajando en picado sobre él, sumergiéndole el cuerpo en su sombra.
-Hay alguien arriba, Selwyn, -dijo el segundo hombre bruscamente.
-¡Es Potter, le digo, que es Potter! –sollozó Xenophilius-. Por favor… por favor… devuélvanme a Luna, sólo les pido que me devuelvan a mi  Luna…

Lily y Alice se sentían igual de mal, por un lado Lily estaba preocupada por su hijo y deseaba que saliera de allí ileso, peo por otro, ambas mujeres pensaban que si les quitaran a sus hijos se volverían locas, y no podrían soportarlo.

-Tendrás a tu niñita, Lovegood, -dijo Selwyn-, si subes esas escaleras y me traes a Harry Potter. Pero si es un complot, si es un truco, si tienes a un cómplice esperándome allí arriba para tendernos una emboscada, veremos si podemos darte un pedacito de tu hija para que la entierres.

En ese momento los insultos de todos hicieron imposible seguir leyendo, Dumbledore jamas había sentido tanto odio como en ese momento, james, sirius, Remus y Frank pensaban despedazar a los mortifagos lenta y dolorosamente, solo por sugerir tal atrocidad, Ángela vio la cara de sirius y supo de inmediato sus intenciones, pero por primera vez no intentó calmarlo, sino que al contrario quiso ella misma hacer parte de la partida de caza, por su parte Lily y Alice pensaron que si alguien se atrevía a expresarse así de sus hijos los matarían de forma dolorosa, solo por insinuar que dañarían a sus pequeños. Cuando pudieron serenarse lo suficiente, Frank, aun bastante disgustado siguió leyendo


Xenophilius gritó de miedo y desesperación. Se oyeron prisas y arañazos.
Xenophilius trataba de pasar a través de los escombros de las escaleras.
-Vamos, -susurró Harry-, tenemos que salir de aquí.
Empezó a excavar él mismo cubierto por todo el ruido que Xenophilius estaba haciendo en la escalera. Ron estaba profundamente sepultado. Harry y Hermione treparon, tan silenciosamente como pudieron, sobre los restos donde yacía, tratando de quitar haciendo palanca una pesada cómoda de sus piernas.

La desesperación por la suerte de Luna y por el desenlace del asunto los tenía al límite, Lily estaba totalmente pálida y  aferraba con fuerza su varita, como si desde allí pudiese ayudar a su hijo.

Mientras Xenophilius golpeaba y arañaba arrastrándose mas y mas cerca, Hermione se las arregló para liberar a Ron utlizando un Encantamiento Levitatorio.
-Bien –jadeó Hermione, cuando la imprenta rota que bloqueaba la parte superior de las escaleras empezó a temblar. Xenophilius estaba a unos pasos de ellos. Todavía estaba blanca de polvo. -¿Confías en mi Harry?

-¿Qué clase de pregunta es esa?—dijo james sonando demasiado brusco debido a la preocupación—por supuesto que confía en ella.!

Harry asintió.
-Entonces vamos. –susurró Hermione-. Dame la Capa Invisible. Ron, póntela encima.

Nadie entendió porque escondía a Ron, excepto Dumbledore, pero el anciano director no quiso interrumpir pese a las caras de desconcierto de todos..

-¿Yo? Pero Harry…
-¡Ron, por favor! Harry sujétame la mano con fuerza, Ron agárrame por el hombro.
Harry la sujetó con la mano izquierda. Ron desapareció bajo la Capa. La imprenta que bloqueaba las escaleras estaba vibrando. Xenophilius trataba de moverla usando un Encanto Levitatorio. Harry no sabía a qué estaba esperando Hermione.

Y Harry no era el único, ni Lily, ni los merodeadores y mucho menos Ángela, Frank o Alice, nadie se explicaba que esperaba la chica para salir de allí

-Sujétame fuerte –susurró-. Sujétame fuerte… sin dudar…solo un poco mas
La cara blanca como el papel de Xenophilius apareció por la parte superior del aparador.
-¡Obliviate! –gritó Hermione, apuntándolo con la varita primero a la cara y después al suelo ante ellos. -¡Deprimo!

Solo hasta ese momento los demás entendieron lo que la chica pretendía, hacer que Xenophilius olvidara que los tres había estado allí y al tiempo lograr que los mortifagos vieran que Harry estaba en la casa, para que no lastimaran a Luna.

Había hecho un agujero en el suelo de la habitación. Cayeron como pedruscos. Harry todavía se aferraba a su mano como a la propia vida. Se oyó un grito abajo, y Harry vislumbró a dos hombres tratando de apartarse del camino de las enormes cantidades de escombros y muebles rotos que llovían a su alrededor desde techo destrozado. Hermione se giró en el aire y el estruendo de la casa derrumbándose zumbó en las orejas de Harry mientras ella lo arrastraba una vez mas hacia la oscuridad.

-Es el final—dijo Frank con la voz ronca

-Pensé que no lo lograrían—confesó Alice

-Hermione es una genio—fue el aporté de Remus—se aseguro de la seguridad de Luna y los sacó a los tres de allí sanos y salvos

-Creo que necesitamos un momento para relajarnos—dijo Lily—esto cada vez se pone peor, y no hemos dormido bien en días

-Además—dijo sirius—no hemos planeado mucho cuales serán nuestros próximos movimientos

-Es verdad—aceptó james—tenemos que decidir que vamos a hacer

-¿Cuándo iremos a esa cueva?—preguntó sirius

-No creo que tengas que ir—dijo Ángela de inmediato asustada

-Si me conoces—le dijo sirius acariciando su mejilla—sabrás que si tengo que hacerlo, es donde murió mi hermano intentando hacer caer a voldemort, además necesitamos ese guardapelo para obtener la ayuda de Kreacher

-Pero…yo—Ángela lo miró a los ojos—te acabo de recuperar, no quiero perderte

-No me pasará nada—le contestó sirius con una ternura que solo dirigía a ella—confía en mi

Ángela le dio una cabezada vacilante, sirius besó sus labios con pasión y se volvió hacia Dumbledore

-Creo que debemos hacerlo mañana mismo

Un silencio se apoderó de la sala y todas las cabezas se giraron hacia el director en espera de su veredicto…

No hay comentarios:

Publicar un comentario